Una foto de Bruno Nieuchowicz es elegida entre 500 como una de las 12 mejores enviadas al Museo de las Diásporas.
A Bruno Nieuchowicz, un joven estudiante uruguayo de 19 años, javer en Jazit Hanoar, ex alumno del Yavne y hoy de la Universidad ORT, le encanta sacar fotos. Siempre le gustó y y todo su entorno conoce su pasión. Gracias a ello se enteró de un concurso en el Museo de las Diásporas en Tel Aviv (Beit Hatfutsot). Lo que no imaginaba era lo alto que llegaría.
Le pedimos a él mismo que nos lo cuente. Este es su relato.
Falta sólo agregar las felicitaciones de Semanario Hebreo.
Soy Bruno Nieuchowicz, tengo 19 años y desde muy pequeño me apasiona la fotografía. Es mi vocación desde que tengo memoria. Y qué mejor que poder unir mi vocación con algo que vivo día a día, como es la religión Judía.
Esto es lo que pude hacer en el marco del concurso de Beit Hatfutsot, el Museo de las Diásporas, en Tel Aviv.
En el mes de octubre me enteré a través de un amigo de mi tnuá (movimiento juvenil) Jazit Hanoar. Me exhortó a participar, sabiendo que siempre saco fotos. Me contacté con el museo para inscribirme en nombre de Jazit. Faltaba sólo un elemento, clave por cierto: la foto.
La consigna o título de la exposición era "Mi nexo con el pueblo judío".
Apenas lo leí, me vinieron a la cabeza dos situaciones: mi papá y mi hermano poniéndose los tefilín y por otro lado mi abuela y mi mamá prendiendo las nerot (velas) de Shabat con mi hermana. Terminé decidiendo por la de las mujeres de la familia ya que estaban las tres generaciones juntas. Y ese fue justamente el título que decidí ponerle a la foto.
Mucho tiempo estuve viendo la toma y fijándome de qué lado quedaba mejor, también teniendo en cuenta que mi hermana se distraía, por lo cual tuve que sacar varias fotos hasta que encontré lo que me pareció era la mirada perfecta. Era la mirada de una nueva generación que estaba aprendiendo las tradiciones a partir de las generaciones anteriores . Creo que eso es lo que transmite la foto, además de que la iluminación de las velas le da una calidez que me pareció la mejor para transmitir la calidez con la que se recibe el Shabat todos los viernes.
El reconocimiento que me dio Beit Hatfutsot por mi foto me significa mucho. El hecho que de más de 500 fotos que se enviaron de más de 20 países del mundo la mía haya quedado entre las mejores 12, es algo que no me lo habría imaginado ni en sueños. Me dio una alegría estupenda, no sólo a mí sino a mi familia y amigos que me felicitaron por todos lados cuando di a conocer la noticia. Agradezco a todas las personas que día a día me acompañan en esta pasión que es para mí la fotografía. Pero más allá de ello, me ha llenado de orgullo haber podido dejar tan bien a la colectividad judía uruguaya y a mi tnuá.
En la exposición hay 12 fotografías que están expuestas físicamente y otras que están en digital. Participó gente de Argentina, México, Chile, España, Panamá, Costa Rica, Uruguay, Brasil, Colombia, Perú, Estados Unidos, Australia, Rusia, Ucrania, Polonia, Alemania,Israel y muchos países más.
En la ceremonia de inauguración, la foto de Bruno proyectada sobre la pantalla.
Lamentablemente no pude asistir a la apertura de la exposición y entrega de reconocimientos pero pudieron ir en mi nombre mi tía Bettina y mi primo Mathias que viajaron especialmente desde Kfar Saba a recibir el reconocimiento. Agradezco que haya ido también el Embajador uruguayo en Israel Bernardo Greiver.
La exposición se encuentra en el Museo Beit Hatfusot , ubicado dentro de la Universidad de Tel Aviv. Durará aproximadamente dos semanas.
