Mundo Judío

MiSinai

La Unidad es Nuestra Fortaleza - Trascender o Cavar Hondo - La Llave Maestra - Rosh Hashaná

 

No. 171

Nitzvamim

Clickear aquí.
Horario de velas en Montevideo, Viernes  23/09 18.24hs.

Demás localidades ver en  www.jabad.org.uy

LA UNIDAD ES NUESTRA FORTALEZA

Por Rabi Ben A.

“Todos ustedes se encuentran hoy firmes ... para hacerte pasar al pacto ...” (Devarim 29:9-11)

La porción de la Torá de Nitzavim siempre se lee en el Shabat previo a Rosh Hashaná, que es el aniversario de la creación del hombre y el día en el que, cada año, toda la creación es juzgada. ¿Cómo ameritamos recibir un juicio favorable desde lo alto? La respuesta está aludida en el versículo de apertura de la lectura de esta semana: “Todos ustedes se encuentran hoy firmes ... para hacerte pasar al pacto”.

Cada parte de esta oración es significativa.

“Todos ustedes” significa toda la nación, como uno. 

“Hoy” es el Día del Juicio anual, Rosh Hashaná. 

“Firmes” implica victoria, que merecemos recibir un veredicto favorable. 

“Para hacerte pasar al pacto” se refiere al hecho de que cada individuo se compromete a ser responsable por los otros, que cada uno es garante por el otro.

En otras palabras, ¿sobre qué base recibimos un juicio favorable? Sobre la base de nuestra unidad. Mientras cumplamos nuestro pacto de ser garantes mutuos, entonces se nos asegura que el juicio de D-os sobre nosotros será para bien.

Sin embargo surge una pregunta: ¿Cómo puede cada miembro de una nación ser garante por cada uno de los otros? Un garante debe ser uno que es mejor que aquel a quien está garantizando. Por ejemplo, cuando una persona pobre solicita un préstamo, le pide a una persona más rica que sea su garantía. No tomaría a alguien que es más pobre que él como su garante. En este caso, ¿cómo puede cada individuo ser garante por todos los otros? Sin duda, en cualquier grupo grande de gente hay personas que tienen poco que ofrecer. ¿Cómo puede cada individuo ser un garante por cada uno de los otros?

La respuesta es simple. En el caso del pacto entre D-os y Su pueblo, cada individuo posee una ventaja única sobre el resto de los otros. Por lo tanto cada uno puede servir como garante para el otro. Cada miembro de la nación tiene alguna cualidad positiva que es única en él o ella. Cada individuo es necesario e indispensable en forma única.

Al “estar todos firmes” de una forma que enfatice nuestra completa interdependencia, renunciamos a nuestras identidades personales y nos redefinimos como parte de un todo más grande y unificado. De esta forma, no somos juzgados en forma individual, sino como un todo, que incluye todas las virtudes redentoras de todos los individuos combinados.

Juntos somos un todo que es más grande que la suma de sus partes.

TRASCENDER O CAVAR HONDO

[Dijo Moshé al pueblo judío:] “Regresarás a D-os ... con todo tu corazón y con toda tu alma.” (Devarim 30:2)

Se nos ordena aquí regresar a D-os con todo nuestro corazón y alma, pero anteriormente se nos había ordenado amar a D-os no solamente con todo nuestro corazón y nuestra alma sino también con “toda nuestra fuerza”. ¿A qué obedece la diferencia?

Amar a D-os con “toda nuestra fuerza” significa dedicarnos a Él más allá de lo que podemos considerar como “normal”, es decir, más allá de lo que tiene sentido lógico.

Por otra parte, el arrepentimiento requiere que forjemos una relación con D-os de un orden más profundo que la que vivíamos hasta el momento. Esa relación con D-os era demasiado débil como para evitar que cometiéramos pecados y requerir el posterior arrepentimiento. Es por ello que necesitamos profundizar nuestros sentimientos hacia D-os, para que Él nos importe más que las veleidades que hemos aprendido a justificar.

Así, la Torá nos pide amar a D-os más allá de lo que pareciera “normal” a la vez que nos pide arrepentirnos de modo tal que lo que solía estar “más allá” se convierta en nuestra nueva “normalidad”. Los procesos asociados al arrepentimiento y al amor son diametralmente opuestos: el primero nos conduce más allá de nuestras limitaciones innatas, mientras que el segundo aporta trascendencia a la conciencia, por naturaleza limitada.

Likutei Sijot, vol. 14, pág. 120, nota 9.

Deuteronomio (Devarim) 29:9 – 30:20

En la octava sección de Deuteronomio, Moshé comienza su tercer y último discurso de despedida al pueblo judío, discurso que pronunció el día de su muerte, el 7 de Adar de 2488. Comienza el mismo pidiendo a todos que se pongan de pie (nitzavim, en hebreo) ante él para sellar el Pacto entre ellos y D-os.

jabad.org.uy/parasha

LA LLAVE MAESTRA

Por Rabbi S.Y. Zevin

En una oportunidad, antes de los Iamim Noraim, el Rabí Israel Baal Shem Tov le dijo al Rabí Ze'ev Kitzes, uno de sus estudiantes destacados: "Para este Rosh Hashaná tú vas a tocar el shofar. Quiero que estudies todas las kavanot (meditaciones cabalísticas) que corresponden al shofar, para que medites sobre ellas cuando lo hagas sonar."

Con alegría y temor el Rabí Ze'ev se dedicó empeñosamente a la tarea encomendada: sentía alegría por el enorme privilegio que le había sido concedido y temor por la inmensidad del deber. Estudió los escritos cabalísticos que tratan la multifacética importancia del shofar y lo que sus sonidos logran obtener en los diferentes niveles de la realidad y las diversas recámaras del alma. También anotó en una hoja los principales puntos de cada kavaná, para así poder referirse a ellos cuando hacía sonar el shofar.

Finalmente, llegó el gran momento. Era la mañana de Rosh Hashaná y el Rabí Ze'ev se ubicó en la plataforma de lectura en el centro de la Sinagoga del Baal Shem Tov entre los rollos de la Torá, rodeado por un mar de cuerpos, cada uno envuelto en su talit. Frente a su mesa, en el rincón sudoeste de la habitación, con el rostro encendido estaba su maestro, el Baal Shem Tov. Un silencio reverente llenaba la habitación anticipando la llegada del momento culminante del día, los desgarradores sonidos y sollozos del shofar.

El Rabí Ze'ev buscó en su bolsillo el papel con las anotaciones y se le paralizó el corazón: la hoja había desaparecido. Recordaba haberla guardado esa mañana en el bolsillo. Hizo un esfuerzo por recordar lo que había estudiado, pero su angustia por las anotaciones perdidas parecía haber paralizado su cerebro: su mente era una enorme laguna mental. Lágrimas de frustración llenaron sus ojos. Su maestro le había encomendado esta tarea más sagrada y él lo había decepcionado. Ahora tenía que tocar el shofar como si fuera un cuerno cualquiera, sin ninguna kavaná. Con el corazón abatido, el Rabí Ze'ev tocó la letanía de sonidos obligatorios por ley y, evitando la mirada de su maestro, volvió a su sitio.

Al finalizar las oraciones del día, el Baal Shem Tov se dirigió al rincón en el que, sollozando bajo su talit, se encontraba el Rabí Ze'ev. "¡Gut Iom Tov, Reb Ze'ev!", le dijo. "¡Hoy pudimos escuchar un toque del shofar absolutamente extraordinario!"

"Pero, Rebe, yo..."

"En el palacio del rey," aclaró el Baal Shem Tov, "hay muchos portales y puertas que conducen a muchas salas y recámaras. Los guardias del palacio tienen enormes llaveros con muchas llaves, cada una de las cuales abre una puerta diferente. Pero hay una llave que sirve para todas las cerraduras, una llave maestra que abre todas las puertas."

"Las kavanot son las llaves, cada una permite abrir otra puerta de nuestras almas, cada una da paso a otra recámara de los mundos espirituales. Pero hay una llave que abre todas las puertas, que nos abre las recámaras más profundas del palacio divino. Esa llave 'maestra' es un corazón humilde."

ROSH HASHANÁ

Rosh Hashaná, el Año Nuevo Judío, es una festividad que dura dos días. Las dos mañanas las pasamos rezando en la sinagoga pidiéndole a D-os que nos confiera un año dulce y próspero y escuchando el shofar (cuerno de carnero).

A continuación, otras tantas costumbres para vivir a pleno la experiencia de Rosh Hashaná.

Observancias Festivas

Las dos noches se encienden las velas, y las dos noches y los dos días de Rosh Hashaná se disfruta del kidush y de suntuosas comidas festivas. No se trabaja, no se conduce, no se escribe ni se encienden ni apagan artefactos eléctricos. Sí, está permitido cocinar y transportar objetos afuera (excepto en Shabat).

Muchas de las costumbres de Rosh Hashaná son un símbolo de la clase de año que esperamos tener. La primera noche de Rosh Hashaná se come una rodaja de manzana untada con miel. Probamos un poquito de la cabeza del pescado, pidiéndole que este año estemos “a la cabeza”. Comemos granadas, diciendo una plegaria para que este año esté lleno de mitzvot igual que la granada está llena de semillas. Y de yapa, en todas las comidas de Rosh Hashaná, se unta la jalá (el pan especial) en miel. Y como si no bastara con el simbolismo, verbalizamos nuestros deseos deseándoles a nuestros familiares y amigos un shaná tová, un año dulce y maravilloso.

Limpieza a Fondo

El primer día de Rosh Hashaná, existe la antigua tradición de ir a un recipiente de agua que contenga peces vivos y allí llevar a cabo la ceremonia de Tashlij. La palabra tashlij significa “arrojar”. Decimos una breve plegaria y nos sacudimos las esquinas de la ropa mientras le pedimos a D-os que arroje nuestros pecados.

El agua es una metáfora de la benevolencia, y los ojos sin párpados de los peces simbolizan nuestra esperanza de que el ojo vigilante de D-os siempre nos custodie. Si el primer día de Rosh Hashaná cae en Shabat, Tashlij se realiza el segundo día. ¿Te olvidaste de hacer Tashlij en Rosh Hashaná? Tienes aún tiempo hasta el último día de Sucot.

 

MiSinaí es una publicación de Jabad Uruguay. Pereira de la luz 1130, Montevideo.
Artículos extraídos de www.Jabad.org.uy y www.Chabad.org, publicados con permiso.
Para recibir MiSinaí por email o por whatsapp, contactar por teléfono al 2628 6770 o por mail: [email protected].

Ultimas Noticias Ver más

Esta página fue generada en 0.0690670 segundos (10042)
2024-05-08T11:59:43-03:00