Ana Jerozolimski / Directora Semanario Hebreo JAI

Editorial

Los defensores de Hamas quieren envenenar a Uruguay de antisemitismo


 

Esta nota no es sobre la guerra entre Israel y Hamas. Esta nota es sobre Uruguay. Sobre la necesidad que las autoridades pertinentes tomen conciencia de lo que está ocurriendo. Y no sólo para proteger a su colectividad de ciudadanos uruguayos judíos sino para proteger a la sociedad uruguaya toda del veneno del odio antisemita que le están inyectando los propagandistas que se presentan como pro palestinos pero hay que aclarar que son pro terroristas de Hamas.

Elementos nefastos están promoviendo el discurso de odio anti judío en Uruguay, disfrazado de preocupación por los derechos palestinos. La osadía va en aumento. De consignas claramente anti israelíes, que criminalizan con mentiras a un país amigo de Uruguay, pasaron al nefasto espectáculo de este viernes 8 de marzo en la marcha del Día internacional de la Mujer, con elementos típicos de los motivos antisemitas nazis . Cruzaron todas las líneas rojas concebibles con ese muñeco espantoso , una cabeza enorme con cara de demonio, colmillos y expresión maléfica, en cuya frente  habia una gran Estrella de David, símbolo del judaísmo.

Dicho sea de paso, la impresión al mirar las fotos y videos que han circulado, es que el grupo que llevaba esa figura de bestia horrenda parecía estar compuesto por menores de edad. Algunas, indudablemente, niñas. ¿Sus padres saben lo que estaban haciendo? ¿Saben que alguien las está usando? Esto amerita una denuncia ante el INAU.

No es casualidad que quienes marcharon con ese monstruo horrendo, hayan llevado también un cartel que decía “Palestina libre” , y que en otra de las pancartas dijera “Palestina del río hasta el mar”, en manos de uno de los colectivos participantes. Es que de fondo de todo esto está la propaganda palestina, que bajo la mentira de defender los “derechos del pueblo palestino”, apoya a Hamas  y con su consigna pide de hecho la destrucción de Israel.

Podríamos detenernos en la estupidez de quienes salen a gritar contra el “patriarcado” pero llevan la pancarta “Palestina libre” , evidentemente dirigida contra Israel, que no entendieron que hay una contradicción intrínseca .Para garantizar la libertad de la mujer, hay que terminar con Hamas. Pero no sólo la libertad de las 19 mujeres israelíes aún secuestradas en manos de los terroristas sino también de la mujer palestina, que para Hamas es un objeto, no un ser humano con igualdad de derechos.

Pero estas ignorantes son sólo parte del problema. La atención central debe ponerse en quien organiza todo esto, en quien financia y paga por los mensajes de odio. Alguien está haciéndolo. Alguien los mueve dentro de Uruguay, elementos extremistas que no hace falta que mencione explícitamente, porque quien tiene que saber, seguramente ya lo sabe. Y probablemente también con dinero del exterior. Dinero sucio que busca odio y que se está instalando en Uruguay. Por ejemplo, alguien mandó a pintar de nuevo “Palestina libre” sobre las pintadas que defienden a Israel y exigen la liberación de los 134 secuestrados por los terroristas, que hace unos días hicieron jóvenes del Partido Colorado por Montevideo. O sea que hay quien está usando a Uruguay de escenario de delitos que deben ser penados por ley.

Esta campaña que se ha intensificado últimamente también recibe inyecciones de energía de notas venenosas en algunos medios de prensa que difunden difamaciones contra Israel, mentiras alevosas, además de alegar que los hechos del 7 de octubre que Israel denuncia y que detonaron la guerra contra Hamas, nunca ocurrieron.

No sorprenden nada. A quienes criminalizan a Israel y están obsesionados con presentarlo como símbolo del mal en el mundo, no les viene bien reconocer que los propios terroristas documentaron y difundieron sus atrocidades. Videos y fotos de horror, de asesinatos, torturas, decapitaciones y violaciones.

Entre los aproximadamente 1200 asesinados el 7 de octubre, casi el 68%  eran civiles. Más de 320 mujeres fueron asesinadas, entre ellas también jovencitas y niñas. Más de 90 mujeres fueron secuestradas, entre ellas menores de edad y también mujeres mayores de 70 y hasta octogenarias. Varias mujeres fueron asesinadas en cautiverio. Hoy quedan 19 mujeres en manos de Hamas, de las cuales 5 se sabe que están muertas. Sobre el resto, no hay certeza, aunque formalmente, en tanto no hay pruebas de lo contrario, se las considera vivas.

Son tantas las pruebas que indican que numerosas mujeres fueron objeto de violaciones y  violencia sexual en general, que inclusive la ONU publicó un informe al respecto. Violadas y asesinadas. Es más: el informe en cuestión hasta afirma que lo más probable es que esas vejaciones continúan en cautiverio.

Es patético y preocupante que igual haya algún medio uruguayo tan poco serio que acepta difundir notas basura que lo niegan.

Exhortamos a las autoridades a investigar quién fomenta todo esto.

Quién lo paga.

Y a tomar medidas para hacer cumplir la ley contra el odio.

Y exhortamos a la sociedad uruguaya toda a protestar, a hablar a viva voz, en las redes y en todas las tribunas posibles.

No es sólo por la ciudanía uruguaya judía.

Es por Uruguay.

Ana Jerozolimski
Directora Semanario Hebreo Jai
(9 de Marzo de 2024)

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