Por el Lic. Rafael (Rufo) Winter
Una fecha lamentablemente poco conocida.
En el año 1996, la Asamblea General de las Naciones Unidas, mediante la Resolución 51/95, fija la fecha del 16 de noviembre como Día Internacional para la Tolerancia.
Como hay un Día Internacional de la Mujer (mucho más conocido), Día Internacional contra la Discriminación Racial y otros, también existe el Día Internacional para la Tolerancia.
Tolerancia en el "buen sentido" del término: no en el sentido de "soportar o aguantar" al otro, sino en el sentido de ACEPTAR al otro.
Obvio que la tolerancia hay que aplicarla todos los días.
Pero éste día -reitero: lamentablemente poco conocido, poco difundido- tiene como objetivo concientizar a las personas en cuanto al valor de la tolerancia, al igual que los otros días tienen el mismo objetivo de concientizar en cuanto a otros valores y/o a situaciones discriminatorias que no deben existir.
La tolerancia se relaciona íntimamente con el respeto.
El respeto al "diferente".
Y bajo el "paraguas" de los DDHH, es muy importante, imprescindible, que haya tolerancia en todos los aspectos del humano vivir.
Me detengo en uno de ellos. La tolerancia religiosa.
La falta de tolerancia religiosa, hasta hoy día, ha sido uno de los males endémicos de la humanidad.
Falta de tolerancia entre religiones, falta de tolerancia dentro una misma religión.
Se pretende deslegitimar con total "naturalidad" (incluso dentro de una misma religión) al que piensa o interpreta distinto, lo que me resulta absolutamente inaceptable e IN-tolerante.
La falta de tolerancia religiosa ha dividido -y sigue dividiendo-a la gente. Cada uno debe ser libre de creer -o no-a su manera, y siempre, reitero, bajo el "paraguas" de los DDHH.
Vivir y dejar vivir. También en materia religiosa.
El Día Internacional para la Tolerancia debe concientizarnos precisamente a ser más tolerantes con el prójimo en todos los distintos aspectos de la vida.
Educar para la tolerancia: una tarea más que necesaria...
