Por Alain Mizrahi
Hoy es el Día de Recordación del Holocausto y del Heroísmo, “Yom Hashoá” en hebreo. Se definió esta fecha por ser aniversario del levantamiento del gueto de Varsovia, el 19/04/1943, pero se conmemora hoy 7 porque se usa el calendario hebreo, el 28 de Nisan. Un poco de historia.
En 1939 habían 3.5 millones de judíos en Polonia. En 1940 los nazis cercaron con un muro un pequeño perímetro de Varsovia - el gueto - en el que hacinaron los 400.000 judíos de la ciudad en condiciones infrahumanas.
La palabra “gueto” proviene del italiano “ghetto” y a su vez del veneciano “geto”, que significa “fundición de hierro”, por la fábrica ubicada donde posteriormente se concentraron los judíos.
En 1942 solo quedaban 50.000, por el hambre, las enfermedades y las deportaciones en masa al campo de exterminio de Treblinka como parte de la siniestra “Solución Final al problema judío” acordada por los nazis en enero de ese año en la Conferencia de Wansee.
Como ya se había filtrado en el gueto la información de los asesinatos en masa en los centros de exterminio, se creó la Zydowska Organizacya Bojowa (Organización Judía de Combate, o ZOB), dirigida por Mordejai Anielewicz, de 23 años.
En enero de 1943 la ZOB resistió con éxito al intento de deportación de los últimos judíos del gueto. Contaban con unas pocas armas caseras y otras ingresadas al gueto de contrabando con la ayuda de la resistencia polaca. Los alemanes se retiraron, sorprendidos.
La ZOB se preparó para el asalto final, sabiendo de antemano cuál sería el resultado. Construyeron barricadas, búnkeres, túneles y pasajes por los techos para luchar hasta la muerte.
El 19 de abril las tropas alemanas al mando del general de las SS Juergen Stroop entraron en el gueto y durante tres días se dedicaron a prender fuego cada casa y edificio uno por uno para obligar a los judíos a salir de sus escondites.
Del gueto no quedó una piedra sobre otra, los que no murieron luchando fueron fusilados en el lugar o deportados y asesinados en Treblinka. Anielewicz y su novia Mira se suicidaron en su bunker. El asalto principal duró tres días pero la resistencia se prolongó un mes.
Juergen Stroop fue juzgado por crímenes de guerra y ejecutado en 1952, en la antigua localización del gueto de Varsovia.
Hoy en Israel durante un minuto suenan las sirenas de ataque aéreo y se paraliza el país entero durante un minuto en memoria de los 6 millones de judíos asesinados por los nazis (ver video)
Y como siempre creo que hay que ponerle caras a la Historia, comparto fotos familiares. En esta, el papá de mi abuela Irene, Mordejai Rabinow, muerto en el gueto de Lodz.
En esta la hermana de mi abuela, Syla, y su esposo (a la derecha), ambos asesinados en Auschwitz. A la izquierda su tía Kaile y su esposo, fusilado por partisano en Bélgica.
La tía de mi abuela, Genia, su esposo Mietek Kolski, y sus dos hijos. Solo Genia sobrevivió. Sus hijos fueron deportados y asesinados a los 17 años.
.... y mi abuela Irene (“Omi”) y mi mamá Jeannine, escondidas en el sur de Francia en 1941, que tuvieron la suerte de poder escaparse y emigrar al Uruguay luego de un largo e increible periplo, que Omi escribió y publicó a los 90 años.
Yo nací apenas 20 años después del final de la guerra y viví toda mi infancia escuchando los horrores de la Shoá. Mi generación carga con la culpa de ser sobrevivientes (psicoanalistas agradecidos). Yo visité Auschwitz en 1986 a los 21 años en época de la cortina de hierro.
Pero también tenemos la enorme responsabilidad de mantener viva la memoria de la Shoá y transmitirla a nuestros hijos para que nunca caiga en el olvido ni sea vencida por los negacionistas
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