El Shin Bet, Servicio General de Seguridad del Shin Bet, ha desbaratado un intento iraní de prepetrar atentados terroristas en Israel, entre los cuales habían planes de atacar a figuras públicas. Hay 5 detenidos en relación al caso, entre ellos 2 ciudadanos israelíes residentes en la zona de Nazaret.
Si bien cada caso puntual es una noticia en sí misma que requiere gran despliegue de Inteligencia y tropas en el terreno, tomando en cuenta el marco general, no hay aquí razón ninguna para verse sorprendido. Irán despliega desde hace mucho tiempo denodados esfuerzos por atacar a israel, a través de su apoyo a grupos terroristas palestinos, a los que financia y en diversos casos arma y entrena. Otro brazo de su actividad es su abastecimiento continuo de armas, inclusive misiles, a la organización chiita libanesa Hezbolá, siendo también un elemento clave en el programa de misiles precisos que ésta desarrolla en el territorio vecino a Israel.
En el plan recién desbaratado hay otros elementos ya que esta vez se trató no sólo de un apoyo general y de incitación que se espera conduzca a la realización de atentados, sino de una intervención directa de agentes iraníes que manejaban el tema a la distancia.
El complot fue expuesto en una operación conjunta entre el Shin Bet, la policía de Israel y las Fuerzas de Defensa de Israel . La infraestructura terrorista estaba operando en Israel y en la región de Judea y Samaria, bajo la dirección y orientación de agentes de seguridad iraníes.
Como parte de la investigación, el Shin Bet realizó 5 arrestos: tres palestinos - Murad Kamamgah, residente de Kafr Dan, de 47 años; Hasan Mujarima, residente de Jenín, de 34 años; y Ziad Shanti, residente de Jenín, de 45 años, así como a dos ciudadanos israelíes del norte del país - Hamad Hamadi, residente de Nazaret, de 23 años, y Yosef Hamadi, residente de Mukhmas, de 18 años. En su método de reclutamiento, se ha confirmado que Irán contacta a ciudadanos israelíes, en general con antecedentes criminales, a los que compra con dinero. Los detenidos son ciudadanos árabes israelíes.
La investigación del Shin Bet revela que Murad y Hasan actuaron bajo la dirección de un agente que reside en Jordania y opera en nombre de agentes de seguridad iraníes. A ambos se les pidió que ayudaran en el contrabando de armas ligeras a Israel y recopilaran información sobre figuras públicas destacadas, incluyendo políticos como el Ministro de Defensa Ben Gvir y el exmiembro del parlamento Yehuda Glick. No lograron concretar sus planes, debido a las medidas de seguridad de Israel.
Posteriormente, Ziad Shanti reclutó a dos ciudadanos israelíes, Hamad Hamadi y Yosef Hamadi, para llevar a cabo atentados con vehículos, y ambos realizaron un atentado en Haifa el 22 de junio de 2023, filmando un video para documentarlo. Se estima que esto fue una prueba para los agentes iraníes, con el objetivo de promover ataques futuros de mayor entidad. Si no se hubiese desmantelado esta infraestructura terrorista, esos atentados habrían sido cometidos.
“Esta historia demuestra una vez más los esfuerzos significativos de Irán para socavar la estabilidad de seguridad, social y política en Israel”, publicó el Shin Bet. Lo intentan reclutando a ciudadanos israelíes y a palestinos.
Cada revelación de planes orquestados por terroristas, sea cual sea su origen, deja en claro el constante esfuerzo del Shin Bet por salvaguardar la seguridad de Israel, su territorio y la vida de sus ciudadanos. Cuando de Irán se trata, es de destacar el brazo terrorista que tanto usa el régimen de los Ayatollas, independientemente del esfuerzo nuclear que nunca ha desaparecido.
