Desde el 8 de octubre la organización terrorista chiita Hezbolá, brazo de Irán en Líbano, ataca diariamente el territorio de Israel con cohetes y misiles de distinta potencia, además de drones explosivos, causando muy serios daños en numerosas localidades a lo largo de toda la frontera norte.
El mes de mayo que acaba de finalizar, ha sido el peor desde el comienzo de la agresión. Según datos publicados por el centro Alma especializado en la investigación y seguimiento de la situación en la frontera septentrional de Israel, entre abril y mayo se ha registrado un 36% de aumento en la cantidad total de ataques de Hezbolá. En abril fueron 238 y en mayo 325, un promedio de 10 por día.
Pero en algunos tipos de ataques, la cifra es prácticamente el doble: se pasó de 42 misiles anti tanques en abril a 85 en mayo y de 50 drones explosivos en abril a 95 en mayo. En este tipo de armas, el aumento ha sido constante, ya que en marzo había habido 24 infiltraciones de drones y en febrero “solamente” 7.
Este domingo 2 de junio la intensidad de los ataques desde Líbano no tuvo precedentes: 10 cohetes a Margaliot, 15 cohetes a la ciudad de Kiriat Shmona, 2 drones explosivos hacia Naharía , 2 misiles anti tanque hacia Metula y 2 drones y 14 cohetes hacia Katzrin en los altos del Golan. Además, Hezbolá va ampliando el alcance de sus ataques. Este domingo hubo un impacto en Naharia y alarmas en Acre.
Esto es lo que vivieron hoy niños israelíes en una escuela del norte, al sonar por enésima vez las alarmas indicando que había cohetes o drones explosivos en camino desde Líbano hacia territorio israelí. Son segundos, en general ni tiempo hay de resguardarse.
— Jana Beris (@JanaBeris1) June 2, 2024
El video lo difundió… pic.twitter.com/hXNDmhPqUs
Desde el comienzo de la guerra hasta fin de mayo, el total de ataques de Hezbolá al norte de Israel fue 1964 , el 46% de ellos contra infraestructura civil y áreas de población civil. Los destrozos son cuantiosos, especialmente en Kiriat Shmona y Metula pero también en otras localidades aledañas a la frontera como el kibutz Manara y varios más.
Estas escenas registradas por Eran Malka muestran parte de lo que ocurrió en Katzrin, en los altos del Golán, que fue hoy blanco de gran cantidad de disparos desde Líbano.
— Jana Beris (@JanaBeris1) June 2, 2024
Entienden en el mundo? Una ciudad tranquila atacada desde el territorio vecino por terroristas.
No, no… pic.twitter.com/9OUZ1DBY4b
La gran pregunta ahora es si acaso existe la posibilidad de terminar con este conflicto por la vía diplomática – lo cual por ahora ha fallado rotundamente- o si la única opción de Israel será intensificar sus ataques a Hezbolá de modo que lo obligue a alejarse de la frontera.Eso significaría una guerra mucho más fuerte en la que Hezbolá ampliaría el disparo de misiles a distancias más lejanas de la frontera con Israel, siendo capaz de hecho de colocar la totalidad del territorio israelí al alcance de su fuego. Pero también Israel tiene mucha mayor capacidad ofensiva y sus ataques causarían un duro daño a las infraestructuras del estado libanés, desde cuyo territorio se ataca a Israel.
La población civil del norte del país, en su enorme mayoría arrancada de raíz de sus ciudades y pueblos, fuera de sus hogares desde hace ya casi 8 meses, está furiosa con el gobierno, considerando que no da la importancia necesaria a la situación al no tomar medidas terminantes que logren cambiarla rotundamente. La exigencia es por un lado alejar militarmente la amenaza de Hezbolá y por otro dedicar los recursos necesarios a un plan de apoyo al norte que permita a la gente seguir adelante y lidiar con esta larga interrupción en su vida normal.
