Ana Jerozolimski / Directora Semanario Hebreo JAI

Editorial

Una decisión polémica y valiente de los Jueces Supremos de Israel


No estaba claro que se animarían. No era seguro que en medio de la tormenta que los envuelve, con el gobierno presentándolos casi como enemigos de la voluntad popular, 10 de 11 jueces de la Suprema Corte de Justicia de Israel tomarían la decisión dramática que tomaron este miércoles.

 

Incusive sabiendo que el gobierno apunta a cortarles poderes alegando que se inmiscuyen en decisiones que no les atañen, los Jueces Supremos supieron tomar una decisión principista que sin duda saben  no hará menos que agudizar las críticas en su contra.

La Suprema Corte de Justicia, reunida con 11 de sus 15 jueces, decidió por mayoría de 10 de ellos, que el nombramiento del jefe del partido ultraortodoxo SHAS Aryé Deri como Ministro del Interior y Salud fue “extremadamente irrazonable”, debido a las reiteradas ocasiones en las que fue condenado por delitos, la más reciente de ellas hace menos de un año, en febrero del 2022, por evasión de impuestos. 

El comunicado de la Suprema Corte determina explícitamente que “el Primer Ministro debe defenestrarlo”.

Otro de los argumentos planteados es que en el último juicio, Deri confesó sus crímenes en el marco de un acuerdo de culpabilidad y dio a entender al juzgado que se retira de la política, lo cual luego no cumplió, alegando luego que nunca se había comprometido a ello.

La decisión se esperó durante algunas semanas. Hace pocos días, un diputado de SHAS, en lo que se interpretó como una amenaza directa, dijo que si deciden contra Deri “se estarán pegando un balazo en la pierna, o mejor dicho, en la cabeza”.

La gran pregunta es qué hará el Primer Ministro Netanyahu, que sin el partido SHAS de Deri -el cual sostiene que él es su único líder- no tiene coalición. El dictamen de los jueces es contra Deri por sus actos, no contra su partido. Pero su rol en el mismo es el de líder indiscutido, al que nadie aceptará ni concebirá siquiera sustituir.

Por ley, Netanyahu tiene que cumplir con la orden de la Suprema Corte y no está claro qué maniobra política puede encontrar para salvar su coalición. La alternativa, no acatar la decisión de los Jueces Supremos, agrava el riesgo de crisis constitucional.

Juristas dirán -y seguro habrá opiniones diversas- si los Jueces Supremos tuvieron razón proceduralmente o si como pensó uno de ellos, en posición de minoría, esto debía plantearse al presidente de la Comisión Electoral central. Desde nuestra mirada, es indudable que hicieron lo correcto.

¿Acaso es razonable -de eso se trataba- que un político declarado culpable de delitos, que lo reconoce ante los jueces , que fue hallado culpable en más de una oportunidad y da a entenderque se retira de la política para que se reduzca su pena, termine siendo uno de los ministros más fuertes del gobierno, con dos carteras enormes a su cargo?

Peor aún es la incitación de los políticos de SHAS contra los Jueces Supremos, aprovechando la sentencia para volver a presentarse como víctimas y acusarlos de discriminar a Deri por ser de origen oriental y no ashkenazí. No es nuevo, este partido siempre usó el tema sectorial y étnico para lograr ganancias políticas, sin importarle el daño que hacía al país.  La Suprema Corte  -dicho sea de paso, con un juez árabe musulmán incluido - no publicó una sentencia contra el público de origen oriental ni contra los votantes por Deri y Netanyahu sino únicamentre contra Deri, por sus acciones, no por sus preferencias políticas.

Lo más preocupante es que  la tensión interna y el hecho que la decisión de la Suprema Corte , evidentemente principista, no calma los ánimos sino todo lo contrario: agrava el enfrentamiento entre el Poder Ejecutivo y el Judicial. Este gira en torno a la dura crítica del gobierno, a través del plan de reforma judicial presentado por el Ministro de Justicia, sobre la alteración –según alegan- del equilibrio entre el Parlamento y la Suprema Corte.

Justamente uno de los puntos que el nuevo plan quiere cambiar, es el poder que tiene hoy la Suprema Corte de cancelar una decisión gubernamental con el argumento de que “no es razonable”, precisamente lo que hicieron los jueces este miércoles.

Israel vive desde hace un tiempo con sensación de crisis.

Al parecer, recién ha comenzado.

Ana Jerozolimski
Directora Semanario Hebreo Jai
(18 de Enero de 2023)

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