"No debemos controlar a otros", afirma Gantz. Y recuerda la desconexión de Gaza en el 2005.
Fotos: Sraya Diamant.
El ex jefe del ejército Benny Gantz, que lanzó recientemente su partido político “Josen LeIsrael”-el único que en los sondeos amenaza con hacer sombra seriamente al Likud de Netanyahu- concedió su primera entrevista a la prensa israelí y como era de esperar, ya provocó llamaradas en el oficialismo.
La tapa del "Yediot Ahronot" del miércoles, con el adelanto de la entrevista.
Los entrevistadores fueron el escritor y periodista Janoj Daum y el cantante Shlomo Artzi, que también tiene una columna fija en el “Yediot Ahronot”, donde salió el reportaje. La versión completa será publicada este viernes en el suplemento de fin de semana pero ya en las declaraciones adelantadas en una primera entrega, hubo material polémico.
Janoj Daum comentó al nuevo candidato que su aliado principal en el partido, el ex ministro de Defensa Moshe Yaalon “se opuso a la desconexión (de Gaza) y considera que no hay partner palestino”. La pregunta era ineludible dado que Yaalon se sumó la semana pasada a la lista de Gantz.”¿Qué postura tiene usted en esos temas?”.
Gantz y Yaalon juntos, días atrás, al confirmarse que Yaalon y su partido "Telem" se unen a "Josen LeIsrael".
“La pregunta central es de seguridad. Debe garantizar la seguridad de Israel. Y está el tema del interés. Nosotros-y también Bibi lo dijo en el discurso de Bar-Ilan- no buscamos controlar a nadie. Debemos hallar la forma en que no estemos controlando a otra gente”, respondió Gantz. Cabe recordar que el así llamado “discurso de Bar-Ilan”, fue el pronunciado por Netanyahu como Primer Ministro en la universidad de dicho nombre en junio del 2009, en el que se manifestó a favor de la fórmula de “dos Estados”, que implica la creación de un Estado palestino junto a Israel, pero en determinadas condiciones y limitaciones que no arriesguen la seguridad israelí.
Daum trajo entonces a colación el plan implementado por Israel en setiembre del 2005, la “desconexión”, cuando se retiró completamente de la Franja de Gaza, un paso que fue dramático para Israel porque se desmanteló todos los poblados civiles que existían en Gush Katif. “Entonces, en la práctica ¿usted está de acuerdo con un paso similar a la desconexión?”, preguntó. Y Gantz respondió: “La desconexión fue llevada a cabo partiendo de un pensamiento político del Estado de Israel”. “¿No se arrepiente de que hayamos arrancado los poblados de allí?”, insistió Daum.
Agosto 2005, demolición de las casas en el asentamiento Morag en Gush Katif.
Foto: Ariel Jerozolimski.
“Fue un paso legal, aprobado por el gobierno de Israel, llevado a cabo por las Fuerzas de Defensa de Israel y por los habitantes, de modo doloroso pero bueno”, respondió Gantz. Y agregó lo que se convirtió en pólvora en su contra: “Hay que tomar las lecciones del caso y aplicarlas en otros lugares”.
La reacción de la derecha fue inmediata. “Gantz quiere desmantelar poblados en Judea y Samaria”. “Quiere entregar Judea y Samaria a los palestinos”…y otras derivaciones.
Parte de la problemática de fondo-es oportuno recordar- radica en el hecho que tras la retirada absoluta de Israel de Gaza, no llegó una era de paz como pensaba el entonces Primer Ministro Ariel Sharon, sino un continuo deterioro de seguridad. Los cohetes que los terroristas habían comenzado a disparar hacia Israel en el 2001, no se detuvieron sino que se intensificaron, y llegaron inclusive a Tel Aviv. Desde la retirada israelí de Gaza, se multiplicaron los ataques a los poblados civiles israelíes, en lugar de desaparecer. O sea…es natural que haya resquemores respecto al resultado de aquella retirada.
Pero ante los ataques Gantz respondió rápidamente. Su equipo de prensa difundió un comunicado en el que junto a una foto de Netanyahu conversando sonriente con Yasser Arafat , se detalló las veces en las que Netanyahu votó a favor del plan de desconexión: 6 de junio del 2004, en el gobierno, 26 de octubre del 2004, en el Parlamento, 16 de febrero del 2005m nuevamente en el Parlamento, al aprobarse la ley para implementación de la desconexión.
También Netanyahu negoció con Arafat, recuerda Gantz. Foto: Avi Ohayon, GPO.
Y agregó: “La desconexión fue dirigida y ejecutada por un gobierno legítimo encabezado por el Likud y fue apoyada por Netanyahu y otros líderes del Likud, con Miri Regev como su vocero (A.J: la actual Ministra, de las más duras críticas de la oposición y las más férreas defensoras de Netanyahu, era la portavoz del ejército en aquellos años). Bajo Gantz, no será tomada ninguna decisión unilateral sobre evacuación de asentamientos”.
La guerra de palabras, continúa.