Este miércoles 3 de noviembre, el Comando de la Defensa Civil (Pikud Haoref) de las Fuerzas de Defensa de Israel, lleva a cabo un simulacro de ataques con misiles en todo el territorio nacional. Se informó con anticipación a la población, indicando dónde y cuándo sonarán las distintas sirenas y alarmas-hay distintos tipos, según la región- para que no cunda el pánico y nadie crea que se trata de un ataque real. Pero al mismo tiempo, se exhorta a la población a reaccionar como si verdaderamente estuviera siendo atacada, a fin de estudiar tiempos de reacción y problemas por resolver.
Es bien sabido que Israel lidia desde su creación misma con numerosos desafíos a su seguridad. La tecnología bélica y la persistencia de sus enemigos en ver cómo dañarle y cobrar víctimas entre sus ciudadanos, ha obligado a Israel a desplegar grandes esfuerzos para lidiar con las distintas amenazas. Uno de los más complejos deriva del hecho que “guerra” ya no es necesariamente entre ejércitos que combaten en el frente, sino que organizaciones terroristas convierten a la retaguardia, o sea la población civil, en el frente central, atacándole con misiles.
Israel ya ha lidiado repetidamente con esta situación. Desde el 2001, ha sido blanco de cohetes disparados desde la Franja de Gaza mayormente hacia el sur del país, pero también a zonas más distintas en el centro mismo de Israel e inclusive más allá de la zona metropolitana de Tel Aviv. En el 2006, fue blanco de miles de cohetes lanzados por Hezbola desde Líbano especialmente hacia la zona norte, pero también más hacia el sur. Y la amenaza misilística está siempre presente, concretada cada tanto con mayor o menos asiduidad, desde la ya mencionada Gaza hacia territorio israelí.
La Oficina de Prensa del Gobierno de Israel editó un video explicativo sobre la singular situación que vive Israel en este sentido. Centrándose en la zona sur del país contigua a Gaza, donde la alarma es una voz que suena por los parlantes diciendo “Tzéva Adóm, tzéva adóm”, repetidamente-lo cual significa “color rojo”- el video señala lo singular de la situación en Israel. Para todo el mundo, donde se vive con normalidad sin terroristas de vecinos, el color rojo puede ser simplemente del semáforo, las frutillas o un buen vino. En Israel, también significa otra cosa.
En proporción a la envergadura de los ataques con cohetes lanzados contra Israel en los últimos 20 años, la pérdida de vidas humanas ha sido relativamente baja por una única razón: el sistema protector desarrollado por Israel para salvaguardar la seguridad de su población.
Esto incluye los refugios, los espacios blindados, las alarmas que alertan sobre la necesidad de correr hacia ellos y la disciplina de la población al respecto. El simulacro de este miércoles es parte del mosaico, clave en la concientización de la población y la necesidad de aceitar sistemas que puedan no estar funcionando bien.
El simulacro de este miércoles del Comando de Defensa Civil se lleva a cabo en cooperación con todas las entidades de emergencia y rescate del país. Sonaron alarmas y sirenas entre las 10 y las 11 de la mañana en distintas partes de Israel y volverán a hacerlo en otras entre las 18 y 19 horas.
