Entrevistas

Daniel Limor, el ex agente del Mossad que ahora lucha en otro frente por el pueblo judío

El uruguayo-israelí Daniel Limor, que comandó el operativo en el que el Mossad participó en el rescate de los judíos de Etiopía a través de Sudán, tuvo claro siempre que hay varias formas de proteger al pueblo judío y su Estado nacional. Como activista social ha emprendido diversas iniciativas relacionadas a la educación y al empoderamiento de jóvenes  y de mujeres a distintos niveles. Muchos de los participantes en esos grupos que ha formado, que enriquecen a la sociedad israelí y la fortalecen, son miembros de la comunidad de origen etíope, pero no todos.

Además,  es un gran defensor de la necesidad de reconocer formalmente a las así llamadas comunidades emergentes tanto en América Latina como en África, o sea comunidades cuyos miembros se han convertido al judaísmo y son estrictos cumplidores de los preceptos del Judaísmo. Ha viajado personalmente a diferentes países del continente latinoamericano y también del africano, encontrándose con miembros de dichas comunidades, y recalca que las autoridades rabínicas y políticas de Israel deberían conocerlas a fondo y permitirles así formalmente ser parte del pueblo judío, porque se lo han ganado con su forma de actuar.

Con una comunidad emergente en Tuxla Gutiérrez, México

 

Con jóvenes de una comunidad emergente en Nigeria

 

En esta segunda parte de nuestra entrevista, presentamos la labor de Daniel Limor como gran activista social en Israel.

 

P: Daniel, muchos de los participantes en tus diversos emprendimientos sociales en Israel, son de la comunidad judia etíope. Tu vínculo especial con la comunidad judía etíope, ¿empezó a raíz del operativo que te tocó en el Mossad?

R: Sí, la verdad es que sí. Antes de esa misión que me encargaron tenía una idea muy superficial sobre la existencia de la comunidad judía en Etiopía y la verdad que realmente no profundicé demasiado. Apenas me encargaron esta misión empecé a estudiar el asunto y a encontrarme con gente. Después con toda la actividad que hubo en Sudán y que tuve acá en Israel me acerqué mucho y realmente me contagié. 

P: ¿De qué?

R: De la personalidad…Hay muchas cosas que me encantan en esta comunidad. Muchos piensan que son tímidos, pero no es cuestión de timidez sino de respeto. Los  jóvenes que nacieron en Israel que llegan a los 15 o 16 años ya son como todos los otros israelíes, ya perdieron esa actitud de especial respeto que trajeron los mayores, los que vinieron de Etiopía. La manera de ser de los judíos etíopes  me atrajo mucho y por eso me siento parte de ellos. 

P: ¿Cuáles son las cifras actualizadas de la comunidad en Israel?

R: Cuántos nacidos en Israel no sé, pero sé que en total por Sudán pasaron 16.500. Después fue la Operación Salomon en 91, que fue directamente desde  Addís Abeba a Israel, en la que legaron otros 15.500. Deb haber en total unos  170.000 o algo por el estilo. 

 

P: Vayamos a tu actividad social. ¿Todos los otros proyectos en los que estás involucrado están relacionados con la comunidad de origen etíope?

R: No, pero hay algunos que sí. El proyecto mayor en el que estoy involucrado, que fue la creación de esa escuela premilitar de liderazgo social, que se llama Najshon, del que fui uno de los fundadores hace 26 años, es un proyecto nacional. Tiene como meta transformar a la sociedad israelí en una sociedad que acepte con mayor facilidad al que es distinto. Recientemente terminó la promoción número 25, terminaron 210 muchachos y chicas, y en cada una de esas graduaciones hay entre 5% y 10% de los estudiantes son de origen etíope, pero ya la mayor parte nacidos en Israel. Es  mucho más de lo que representan en la población. Desde el primer día que creamos este curso, esta mejiná,  dije que quería que hubiera estudiantes de origen etíope y eso siguió todos los años. 

P: ¿Qué más? Sé que estás en muchas cosas.

R: Otros proyectos en los que estoy involucrado están principalmente destinados a la integración de jóvenes etiopies en la sociedad israelí, a limitar las diferencias sociales, para realmente poder multiplicar… Por ejemplo, uno de los proyectos en los que estoy es una escuela que forma a jóvenes de los dos sexos de origen etíope que ya terminaron el servicio militar. Los prepara para trabajar en compañías de hi-tech, sector en el que hasta hace 10 años no había ningúne etíope. Ahora ya hay  centenas, si no más de 1.000, que se graduaron de esa escuela que creamos de cuya dirección yo soy miembro .Uno entra a una visita hoy a compañías hi-tech de las más grandes a las más chicas y se ve bastantes empleados de origen etíope. Ese es uno de los proyectos. 

 

P: Uno de varios.

R:Así es. También estoy en un proyecto que se llama Mujeres Etíopes que se Refuerzan, es decir, es una asociación que da la posibilidad a mujeres que son ya casadas, por ejemplo, o que tienen niños, de salir de casa y estudiar una carrera . Es lo mismo… o cuestiones de hi-tech, computadoras, o alguna otra profesión, para que puedan participar en la manutención de su familia. Y ahí me siento a veces una especie de Pasha porque soy el único hombre en la dirección de esa asociación…

P: Querés decir que te sentís  rodeado por un harén…

R: Ahí va, sin mencionar que además del único hombre, soy el único blanco. 

P: Antes de grabar, me dijiste que sos el blanco más negro que existe.

R: Así es. Me siento muy bien y siento que estoy ayudando, porque yo lo que trato es de obtener inversiones en esta asociación para poder subvencionar cursos en los cuales estas mujeres pueden estudiar y mejorar su condición. 

 

P: Y estás en iniciativas relacionadas directamente a la educación en sectores, digamos, marginales.

R: Así es. Hay otro que lo iniciamos este año para permitir a jóvenes que el ejército no recluta, porque tienen un pasado de antecedentes penales, que salgan adelante. Creamos una mejiná especial , o sea un curso preparatorio, y llegamos a un acuerdo con el ejército según el cual los que terminen el programa que nosotros creamos -para sacarlos de donde están y colocarlos en una situación en la cual evitan mezclarse con los amigos de antes y caer otra vez en las trampas penales- serán reclutados.  Eso les cambia totalmente la vida, porque después del servicio militar ya se les abren las puertas, cosa que ahora no lo tienen y entran en ese círculo vicioso, que de crimen en crimen van a pasar el resto de sus vidas en la cárcel. Esto es muy difícil. Y el que dirige esta mejiná es un muchacho que fue estudiante en Najshon así que para mí es realmente un gran orgullo poder trabajar con alguien que fue mi estudiante.

P: Entiendo que esta mejiná es para todo tipo de sectores, no solo para los chicos etíopes. 

R: Así es, para todos.  

 

Las historias humanas, el éxito

P: ¿Me podés dar algunos ejemplos de los casos de éxito que más te emocionan?

R: Te cuento ante todo que Primeramente, estamos instalados en el kibutz Ein Hashlosha . Hubo en su momento una reunión de los miembros del kibutz para ver si querían aceptar que tal mejiná funcionara ahí, ya que  son personas con antecedentes penales.El muchacho que dirige esta mejiná y yo participamos en esa reunión, nos preguntaron si tenían que tener cuidado con las chicas del kibutz después del oscurecer, si pueden pasearse en los caminitos, y cosas así…

P: Creo que es comprensible que pregunten, normal.

R: Es normal… Estudié un poco la constitución demográfica del kibutz y descubrí que hay una mayoría argentina y una minoría uruguaya, entonces me las arreglé para encontrarme con los uruguayos y decirles que dependía de ellos  que hicieran pasar la decisión. Algunos de los uruguayos habían leído los artículos que publicaste la primera vez que me entrevistaste. Y me dijeron que no me preocupe, que ellos seguramente convencerían a los argentinos si es que dudaban.  Al final se aprobó por unanimidad aceptarlos.

P: Genial…ahora, hablando en serio nuevamente. Por un lado, están los antecedentes problemáticos y por otro, si están en la mejiná es porque quieren mejorar su camino…

R: Claro. Te cuento el caso de un muchacho. Cuando tenía 16 años asesinaron a su hermano con dos balas en la cabeza en la calle. El hermano estaba metido en cosas de drogas, estaban hablando con él y con una hermana y vienen dos tipos en motocicleta, uno le dispara dos balas al hermano, que se muere en sus brazos. Después la madre cuando le cuentan eso pierde realmente la cabeza, sufre una depresión nerviosa. Al fin y al cabo el muchacho se siente responsable por sus hermanas y entonces adquiere, de una manera u otra, una pistola. Nunca la utiliza, ni siquiera la lleva encima, pero una vez la policía hace un allanamiento en su casa, encuentra la pistola y lo acusan de porte de arma sin permiso. Entonces le abren un expediente y lo condenan a dos años de prisión. Ahí fuimos al tribunal para hablar con el juez para pedirle que lo dejara venir a nuestra mejiná, que nosotros nos hacíamos responsables, dimos la garantía y todo lo necesario. El muchacho terminó exitosamente la mejiná y ahora está pasando unos días de entrenamiento con los paracaidistas para ver si lo aceptan. Se puede decir que es un caso en el que lo salvamos de dos años de prisión. Es él el que hizo el esfuerzo y ahora puede tener un futuro diferente al que tenía hace cinco o seis meses. 

 

P: Qué emocionante. Me imagino tu satisfacción.

R: Sí, la verdad que sí.

P: ¿Alguna otra iniciativa especial?

R: Si, me olvidé completamente de dos asociaciones de las que también soy miembro, de una de ellas miembro fundador, se llama Israelíes Contra el Racismo. Esa es una asociación que fundamos con unos amigos, principalmente exoficiales superiores del ejército como Israel Ziv , Eliezer Shkedi, Doron Almog….

P: Todas grandes personalidades.

R: Pues con ellos fundamos la organización hace más de dos años. Empezó con un incidente que me enojó mucho en una compañía de paracaidistas en la que el comandante del batallón lo llamó despectivamente a este muchacho de origen etíope. Llamé por teléfono a excompañeros de los paracaidistas que después fueron comandantes de la brigada o generales, y empezamos una movida… Ellos se ocuparon de hablar con el jefe del Estado Mayor y con el comandante de la brigada y a ese oficial lo echaron del ejército. Alrededor de eso estuvimos almorzando Israel Ziv y yo y decidimos levantar esa asociación. Se ocupó del tema de los jóvenes de origen etíope pero también de los haredim ultraortodoxos.

 

P: ¿Por qué? ¿Qué tenían que ver?

R: Recordarás que durante la pandemia hubo muchos sentimientos contra ese sector.Pues la asociación todavía existe pero tiene menos actividad. Reaccionamos directamente cuando pasa algo. Seguimos reuniéndonos de vez en cuando y cada vez que hay un incidente tenemos un grupo de WhatsApp en el que discutimos el asunto de cómo reaccionar. 

P: Daniel, por un lado está claro que también en Israel hay gente que discrimina, racistas, gente con sentimientos de superioridad o lo que sea, como en todo grupo humano. Por otro lado, creo que está claro que el ejército es el marco más inclusivo de Israel, ¿no?

R: Eso seguro, pero también ahí pueden pasar cosas. También tenemos en la asociación miembros que son de origen etíope, oficiales del ejército, y bueno… Es un grupo, debe haber unas 50 personas, y cada uno emite su opinión dependiendo de lo que pasó, hay quienes son más activistas y otros que son más prudentes, yo qué sé. Hay de todo. Pero es importante tener estos marcos porque es clave luchar por cosas que están mal o pueden estar mucho mejor en la sociedad.

P: Muchas gracias Daniel. Te deseo éxito en todo lo que haces.

R: Gracias, igualmente!

 

Ana Jerozolimski
(08 Agosto 2022 , 20:02)

Ultimas Noticias Ver más

MiSinai
Mundo Judío

MiSinai

27 Marzo 2024


¡No Seas Demasiado Humilde! - La Eterna Llama Interior - Control de Impulsos - Preparativos para Pesaj  

Esta página fue generada en 0.0553010 segundos (2741)
2024-03-29T03:51:21-03:00