Ya son 35 los muertos en lo que va del año
Con el asesinato este lunes a balazos de una maestra jardinera israelí de 42 años, cuando el coche en el que viajaba fue atacado a distancia cero por palestinos desde otro auto en marcha, ascendió a 35 la cantidad de víctimas mortales del terrorismo desde comienzos del año en curso. Batsheva Nigri viajaba en la carretera 60 aledaña a Hebron, cuando terroristas de Al Fatah se acercaron a su coche y abrieron fuego, disparando más de 20 balas. Ella murió poco después y el hombre que conducía resultó gravemente herido. Los médicos en el hospital Soroka informaron que no corre peligro de muerte. El atentado fue perpetrado mientras en el asiento de atrás viajaba una niña de 12 años, una de las hijas de Batsheva que por milagro salió ilesa, pero vio todo el horror con sus propios ojos.
35 muertos en algo menos de 8 meses.
La enorme mayoría eran civiles , entre ellos varios jóvenes y dos niños pequeños, y hubo también varios soldados y guardias. Todos los atentados fueron perpetrados por terroristas palestinos, menos el de junio en la frontera con Egipto, en el que un policía egipcio cruzó hacia territorio israelí y asesinó por sorpresa a tres soldados que montaban guardia. Uno de los muertos, el Sargento Primero David Yehuda Yizhak, murió por un disparo equivocado de otro soldado durante el operativo anti terrorista en el campamento de refugiados Jenin a comienzos de julio.
Hubo atentados con armas de fuego, acuchillamientos, embestidas con autos y cohetes disparados desde Gaza. La enorme mayoría de las víctimas eran judías pero también hubo un combatiente beduino musulmán en la Guardia de Fronteras y un obrero de la Franja de Gaza alcanzado por esquirlas de un cohete disparado desde el otro lado de la frontera, cuando trabajaba en territorio israelí. Murieron también una trabajadora extranjera de Ucrania y un turista italiano.
Familias enteras quedaron destrozadas, en algunos casos habiendo perdido a más de uno de sus miembros. Hubo tres pares de hermanos que murieron juntos, entre ellos dos niños de 6 y 8 años, y un padre y su hijo, estos últimos en el atentado del sábado pasado.. También víctimas que murieron ante la atónita mirada de sus seres queridos que no tuvieron nada que hacer para impedirlo: Shlomo Lederman que murió aplastado por un coche que lo atropelló, en una parada de ómnibus en la que aguardaba transporte junto a su esposa, con la que había contraído matrimonio medio año antes, y las jóvenes hermanas de la familia Dee, baleadas de muerte en la zona del valle del Jordán en un ataque en el que su madre resultó gravemente herida y finalmente falleció.
En los atentados de este año hubo también 140 heridos, lo cual significa que aún hay no pocas personas que lidian con sufrimiento físico y evidentemente con las implicaciones emocionales de lo vivido. El 3 de julio un terrorista embistió con su automóvil a civiles en el barrio Neot Afeka en Tel Aviv y dejó a 9 personas heridas, entre ellas una mujer que se hallaba en su sexto mes de embarazo y perdió a su bebé. Este no se incluye en el cómputo de víctimas de este año, pero debe ser recordado.
Quien tampoco se incluye en la lista de víctimas del 2023 aunque falleció este año fue Shimon Maatuf (75) , padre de 6 hijos y abuelo de 13 nietos, quien resultó gravemente herido en el atentado de la víspera de Iom Haatzmaut del año pasado en la ciudad de Elad en el que terroristas atacaron a hachazos a varias personas. Shimon sucumbió a sus heridas a comienzos de febrero último, pero su muerte se computa como parte de la lista del año pasado.
Según un resumen elaborado por el portal israelí Ynet, el año en curso es uno de los más mortales desde la segunda intifada, durante la que fueron asesinados más de 1.000 israelíes en atentados palestinos. Salvo el 2006, año en el que hubo 165 muertos en la segunda guerra en Líbano, y el 2014, en el que hubo 75 muertos durante el operativo Margen Protector contra Hamas en Gaza, el 2023 ya se ha convertido en el año más letal, con 35 víctimas, faltando aún más de 4 meses hasta su finalización. El año pasado fueron 31 los muertos.
Cada uno es un mundo. Bendita sea la memoria de todos.