Por Nora Kimelman
El próximo viernes 31 de mayo, a las 11 hs. se inaugurará en la proa de las calles Arenal Grande, Isla de Gorriti y Democracia el monumento “Abrazo de los pueblos”, en homenaje a la inmigración judía al Uruguay. El evento es auspiciado por el Comité Central Israelita del Uruguay, la Comunidad Israelita del Uruguay y la Asociación Cultural Israelita Dr. Jaime Zhitlovsky. Las encargadas de la obra fueron la artista plástica Nora Kimelman y la Arquitecta Charna Furman.
Abrazo. Inauguración
Llamado de las raíces.
Como artista visual siempre he estado interesada en las migraciones y en sus efectos positivos y negativos sobre la paz mundial. En los últimos años he investigado y creado enfocada en estos temas.
Hace unos 7 años, la Arq. Charna Furman, quien era entonces concejala del Municipio C de Montevideo, me convocó a realizar una escultura monumento en homenaje a las migraciones judías que llegaron a comienzos del Siglo XX a lo que entonces era el Barrio Reus.
La presencia de los inmigrantes judíos en el Barrio Reus, y sus aportes culturales y vitales fue tan importante que, en el lenguaje popular, la zona pasó a llamarse el Barrio de los Judíos
Charna Furman lamentaba que en la zona no existiera ningún elemento conmemorativo y me planteó desarrollar la idea desde el punto de vista artístico.
Sentí un llamado de mis raíces, que me llevo a bocetar e imaginar de
Inmediato, lo que iba a constituir una futura escultura.
La idea de crear una obra para el barrio se fue concretando con El Abrazo de los Pueblos que hoy inauguramos y que pretende difundir un profundo agradecimiento al pueblo uruguayo por su apertura, solidaridad y empatía con todas las migraciones y muy especialmente con la comunidad judía que encontró en este país un refugio de paz, respeto y confianza.
Nuestro querido Uruguay recibió a todos los inmigrantes con gran apertura y gracias a ello, pudieron educar a sus hijos y prosperar como seres humanos en un clima de paz y armonía.
Espero que esta obra sea un abrazo estrecho y verdadero entre la hospitalidad del país y el empuje y fortaleza de los inmigrantes. Y se convierta, además, en un mensaje de paz y tolerancia para el mundo.
Nora Kimelman
www.norakimelman.com
