Mayo fue un mes de muchas lecturas. De momentos de mucha angustia en los que encontré en la lectura un salvoconducto a un estado mental con más amor y menos odio. Leer es un viaje sin aeropuerto ni pasaporte.
"La última actriz" de Tamara Tenembaum
La literatura de Tamara Tenembaum está profundamente relacionada con lo judío. Exceptuando "El fin del amor", sus libros "Nadie vive tan cerca de nadie" y "Todas nuestras maldiciones se cumplieron", así como la obra de teatro "Las moiras", abordan estas temáticas. Tiene también un libro de poemas que no he leído y algunas otras obras que desconozco. Me gusta cómo escribe, a pesar de que su feroz crítica al capitalismo, presente en sus textos, me rechina.
"La última actriz" no es una gran novela, pero vale la pena leerla. La escuché en Instagram decir que muchas veces no nos preguntamos qué pasa cuando los archivos se queman, como en el caso de la AMIA. Primero nos preocupamos por las vidas humanas, pero luego vienen los documentos. Ahora que estoy impartiendo literatura traducida del yiddish con Esther Cukierman, pienso en esos archivos que se quemaron y no se recuperarán jamás.
La primera parte de la novela transcurre en la actualidad. Sabrina es una investigadora del CONICET que propone para su tesis doctoral el tema de la disolución del teatro yiddish en Argentina. Los documentos ya no están. En realidad, ella quería ser actriz, pero no tenía talento. Decide entonces estudiar arte y dedicarse a la crítica. Su vida está inmersa en el mundo académico: su novio es profesor y codirige su tesis; sus amigas son investigadoras o se dedican al arte. A medida que avanza, la investigación se filtra en su vida privada y la obsesiona de tal manera que desplaza todos los demás intereses.
La segunda parte toma la forma de un diario rescatado entre los escombros del atentado. Jana es una chica judía que trabaja en las oficinas del cementerio de la AMIA a mediados del siglo XX. Escribe sobre su día a día: su mayor deseo es ser actriz, tiene una madre conservadora, un amor secreto, un pretendiente aburrido y una vida limitada por las restricciones de su comunidad. Así, narra cómo era el teatro y la vida de Jana, quien también trabaja en el cementerio.
Tamara Tenembaum, en este libro, inventa una historia y escribe sobre lo que conoce. Si algo conoce, es la identidad judía, las costumbres de la comunidad ortodoxa y no ortodoxa, aunque huyó de la ortodoxa a los doce años. Por debajo de estas dos historias, se aborda la identidad judía en Argentina, con el teatro yiddish o reinventándolo con "Las moiras" y con "El día más largo del mundo", que se estrenó el primero de junio.
"El año en que hablamos con el mar" de Andrés Montero
Estaba esperando casi con desesperanza libros ambientados durante la pandemia. Andrés Montero, a quien leo por primera vez, me sorprendió.
Un hermano vuelve a la que fue su casa después de 50 años en avioneta y no puede retornar por la pandemia.
Trata de las decisiones sobre nuestro destino que tomamos y que nos cambian de manera diametral la vida.
La historia de los hermanos Garcés me conmovió profundamente. Una isla alejada del continente, marcada por la naturaleza y por los parroquianos, es el escenario de esta intrigante trama. Desde la primera página, el lector se pregunta qué pasó con los hermanos. Es una historia mágica que, sobre todo, transporta a otro mundo.
Es original y un viaje a la otredad. Vale la pena leerlo.
"Una escritora en la cocina" de Laurie Colwin
Es un libro de recetas mezclado con uno de memorias. Un día nos juntamos con Annete para escribir un libro así, pero no se dio. Manu da Silveira escribió uno con Xime Torres. Yo lo compré, se lo presté a Annete y nunca más me lo devolvió.
Fue innovador en su momento porque tenía las playlists de la música que escuchaba Xime Torres cuando cocinaba. Yo iba mucho a la Dulcería de Jaime Zudañez y ahí se juntaban las dos. El libro se llama “Comer y reír”.
El libro que nos ocupa hoy me llama más la atención por el humor y por la cantidad de manteca en las recetas. Me gustan las referencias sobre dónde comprar los ingredientes y las anécdotas que cuenta.
Tiene un aroma a Nora Ephron, en esa tradición de humor americano. Con capítulos como «A solas con una berenjena», «Cenas repulsivas: mi testimonio» y «Aleta de ternera rellena: mala idea», Colwin nos colma de anécdotas y nos desvela platos que salieron magníficamente bien o desastrosamente mal. Un auténtico festín para cuerpo y alma.
"La asistenta" de Freida Macfadden
Es un libro ideal para pasar el rato. Es perfecto para mejorar tu día; lo lees y te olvidas del mundo. No es mi género favorito, y los personajes son algo planos, pero vale la pena leerlo.
Me encantan los thrillers del estilo de "La asistenta", con una tensión que aumenta progresivamente, pocos personajes y una situación angustiante casi desde la primera página. Y, por supuesto, con un buen giro argumental que me sorprenda. Todo esto lo he encontrado en esta novela, que, con ese prólogo, atrapa desde el primer momento.
"El invencible verano de Liliana" por Cristina Rivera Garza
El 16 de julio de 1990, Liliana Rivera Garza fue víctima de feminicidio. Su pareja, con quien llevaba 20 años, la asesinó. Esta es su historia, contada por su hermana. Una novela que rescata memorias y busca justicia para ella y para todas. En esa época, no se hablaba del tema.
La autora recopila cartas de amigos de su hermana que la mostraban como una muchacha querida y libre. Me gustaron las referencias de época porque son contemporáneas a mi vida. Hay una descripción muy precisa de la vida estudiantil de entonces.
No hay muchas referencias al autor del feminicidio porque Liliana no pidió ayuda. Su decisión, cuando ella lo dejó, fue que sin él no tendría vida. Hay algunas referencias al patriarcado que me molestaron bastante; una que recuerdo es “estado opresor y machista”.
Han pasado treinta años y cada vez más hombres arrebatan la vida a mujeres porque las abandonan. Es un mal que acucia a la sociedad. Por un lado, las mujeres son cada vez más independientes económicamente y ya no quieren que los hombres controlen sus vidas.
El libro vale la pena. Ganó el Pulitzer, está bien logrado, es como un rompecabezas. Liliana tenía una familia, no estaba sola, pero el asesino encontró el momento para matarla.
