Una joven mujer uruguaya que hizo carrera en Israel y en Estados Unidos.
Liliana Farber es una inspiración y un ejemplo. Gracias por estar presente en Semanariohebreojai.
Breve reseña de presentación
Soy de nuevos medios nacida en Uruguay y basada en Nueva York, recibí mi MFA de la Escuela de Diseño Parsons, The New School (Nueva York), previamente completé un Postgrado en Bellas Artes en la Escuela de Arte Hamidrasha, Beit Berl (Israel), y soy Licenciada en Diseño Gráfico por la Universidad O.R.T en Uruguay. Expuse individualmente en 1708 Gallery en Richmond, V.A (USA), Arebyte Gallery (Londres); Centro Dodecá, galería Marte UpMarket, y en el Ministerio de Educación y Cultura (Montevideo). Participé de numerosas exposiciones colectivas destacándose: Museo Nacional de Arte Contemporáneo (Portugal), Glassbox Art Space (París), Festival Ars Electronica (Austria), WRO Media Art Biennale (Polonia), Festival FILE (Brasil), Museo de Arte Katonah (USA), Galería Raw Art (Tel Aviv), Museo Nacional de Bellas Artes (Chile), y Museo Nacional de Artes Visuales (Uruguay). Farber recibió el Premio de Cultura de la Red del Festival Stuttgarter Filmwinter (Alemania), El Premio de Arte y Tecnología del Subte (Montevideo), y el Premio a la Excelencia en Arte del Ministerio de Inmigración (Israel).
¿Cómo se hace posible ser artista de verdad?
Una profesora me dijo una vez: la carrera de artista no es una de 100 metros, es una maratón. Con los años he descubierto que esto es cierto. Ser artista es una prueba de resistencia. Hay que resistir el fracaso, a las dificultades económicas, a la falta de suerte, a la falta de sueño. La carrera de artista es un sube y baja. Lo difícil no es hacer una obra que sea bien recibida, lo difícil es mantenerse en el camino creativo. A mi entender, los artistas que se mantienen en éste, son los que no hacen arte porque quieren, sino porque deben.
Contanos tu trayectoria en Israel y qué haces ahora.
Hice aliya un año después de recibirme de la O.R.T. Tenía ganas de ver el mundo, de probarme a mí misma, y de continuar mis estudios académicos en el arte. En Israel estudié un postgrado, trabajé como directora de arte de una startup, y como diseñadora UI/UX independiente. En cierto momento surgió la oportunidad de venir a Nueva York y decidí tirarme al agua nuevamente. Aquí cursé un master en arte el cual terminé en el pasado mes de mayo. Ahora estoy trabajando medio tiempo en una empresa de High Tech como diseñadora de producto y continuando mi carrera artística. Acabo de inaugurar una muestra individual en Richmond y estoy trabajando para una muestra individual que se inaugurará en Octubre en el Museo Histórico Cabildo en Montevideo.
¿Cuándo te diste cuenta de lo que querías hacer en la vida?
Desde que tengo memoria tengo una gran curiosidad por lo visual, pero en el liceo descubrí que tengo facilidad para las ciencias. Creo que siempre supe que quería ser artista, la sorpresa fue dedicarme a intersección entre arte y tecnología. ¿Cuando me dí cuenta? Probablemente cuando ya estaba con las manos en la masa.
¿Quiénes fueron tus inspiradores o padrinos?
Analía Sandleris en Uruguay, Deganit Berest en Israel, y Terike Haapoja en USA. Las tres excepcionales artistas, maestras, y mujeres de gran corazón.
¿Qué es para vos el feminismo?
Feminismo es un término en continua expansión, pero para mí es el permitir a las personas que desarrollen a pleno su potencial como individuos sin importar su género. Esta consigna toma como preconcepto la igualdad legal y moral de todos los seres humanos.
¿Cuáles son los objetivos que a tu entender debería buscar el feminismo?
El feminismo cuestiona el estatus quo, mientras este cambia y evoluciona.
¿Cómo es ser artista mujer? ¿Hay alguna diferencia?
En Estados Unidos, las mujeres conforman el 70% de los estudiantes de arte, aunque sólo el 46% de los artistas que trabajan como tal son mujeres. Asimismo, entre 2008 y 2019, según Artnet, subastas de arte han recaudado más de US$ 196.6 mil millones mientras US$ 4 mil millones (cerca del 2%) corresponden a ventas de obras de arte realizadas por mujeres artistas.
¿Cómo fueron los ejemplos de mujeres con los que te criaste en tu familia?
Vengo de una familia de mujeres luchadoras e independientes. Mis abuelas ambas fueron de carácter fuerte. Ambas en cierto punto tomaron decisiones siguiendo sus deseos, y no lo que era esperado de ellas. Mi familia dice que yo heredé mi carácter de mis abuelas. No estoy segura de que digan esto como cumplido, pero para mí lo es. Mi madre es una mujer inteligente, de mano firme y tenaz. No hubiera yo podido dejar mi mundo y embarcar, sola, a lo desconocido, si no me hubiera criado con estas valientes mujeres.
¿Qué te parece que cambió con el movimiento "Me too"?
En lo personal, el movimiento “Me too” me hizo reflexionar y prestar atención a las agresiones menores y cotidianas que como mujer siento. A las dinámicas de poder en interacciones con hombres, y a las diferentes instancias en que el consenso en coercido. El movimiento “Me too” me dió fuerzas para proteger mi postura, como mujer y ser humano.