Hace tan solo unas pocas semanas arribó a Montevideo el nuevo rabino del Yavne Itzjak Preschel, nacido en Uruguay y radicado en Israel a los 11 años cuando sus padres decidieron hacer aliá. En un momento especial como lo es la llegada del nuevo año judío, nos alegra conocerlo y poder compartir esta entrevista con toda la colectividad.
P: Itzjak, esta entrevista la programamos de cara al número especial de Rosh Hashaná, en cuyo marco me gusta publicar algo sobre cada una de las comunidades que componen nuestra colectividad. Y aquí estás tú por Yavne. Pero además, no sólo que es la primera entrevista que te hago, sino que para ti estos son tiempos muy especiales. Sos uruguayo, entiendo que cuando tenías 11 años tu familia se radicó en Israel y por ende creciste en Israel. Y ahora, ya como rabino, al frente de una familia, con 5 hijos, llegaste a Montevideo nuevamente como rabino de Yavne….Así que tenemos varios ángulos para abordar. Contame ante todo en términos generales cómo te estás sintiendo.
R: La verdad es que la emoción es muy grande, nunca imaginé que iba a volver a Uruguay en estas circunstancias.
Al mismo tiempo siento una gran responsabilidad, en primer lugar para con mi esposa e hijos, que a diferencia mía no son uruguayos y el castellano les es extraño . Mi señora entiende todo, pero le cuesta hablar, por lo cual también tengo que estar muy pendiente de ellos. Y obviamente una gran responsabilidad frente a la comunidad.
P: Sin duda es una gran responsabilidad y te deseo mucho éxito. ¿Con qué espíritu esperás esta vez Rosh Hashaná y los Iamim Noraim en especial?
R: Sin duda con un gran espíritu de shlijut, de misión especial que debo cumplir.
Los sabios nos dicen que somos esclavos e hijos de D´s, pero en la shlijut, y más que nada en estos dias, siento más como si yo trabajara junto a él. Solemos sentirnos para con D´s como un hijo que representa a su padre. En esta ocasión en realidad me siento su portavoz.
P: ¿Será la primera vez que los jaguim, las Altas Fiestas, tengan para ti también una dimensión comunitaria en un sentido, digamos, institucional? O sea, que vayan más allá de la vivencia personal y familiar de un judío creyente.
R: Realmente cundo estudié para ser rabino- lo fui en la ciudad Shoam, en Israel- en Iom kipur teníamos un minian muy grande. Junto a más parejas que estaban con nosotros nos hacíamos cargo, pero igual es muy diferente. Ahora también las comidas y todos los días, la rutina diaria, son parte de la dimesión comunitaria, así que el reto es aun más grande y emicionante.
P: ¿Qué significa prepararse para las fiestas en Yavne?
R: Es una gran emoción. Sabemos que en las fiestas vendrán judíos que quizás es la única vez al año que vienen, lo cual nos hace sentir mucho más responsables a la hora de mostrar lo bonito que es ser parte de esta gran comunidad, y al mismo tiempo rezar que puedan seguir participando más involucrados con la religión y la comunidad.
P: Contame por favor Itzjak sobre tu familia y cómo se están insertando , aclimatando, en Uruguay.

R: La verdad es que nos recibieron de una forma maravillosa y aprovecho a agradecerle a toda la comunidad. A mis hijos todavía les cuesta mucho el idioma, pero gracias a D´s reciben mucho apoyo. Mi querida esposa es la directora del área de hebreo y judaísmo en el colegio y también se está adaptando de a poquito.
P: ¿Qué hacías en Israel? ¿Cómo era tu vida en Israel hasta que viajaste a Uruguay?
R: Solía dar clase en una yeshivá de todas las materias sagradas, también hacía britot (brit mila-circuncisión), y a las noches era entrenador de basquet . Me encantan los deportes.
P: Genial, congeniando cosas muy distintas. ¿Cómo te sentís volviendo al país en el que naciste?
R: Me resulta muy emocionante y también raro. Hay muchas cosas que recordaba y muchas otras que no. Y de las que sí tenía presente, lugares determinados, me parecen mucho más chicos de lo que yo recordaba.
P: Típico, porque te fuiste a los 11 años…a todos nos pasa. ¿Habías estado en Uruguay desde que tus padres hicieron aliá?
R: No, mis papás y mis hermanos habían vuelto, pero yo no.

Mutuo enriquecimiento
P: ¿Qué te parece que tiene una comunidad judía en la diáspora, en este caso Yavne, donde tú estás, para enseñarle a Israel?
R. No sé si hablo de toda comunidad judía en la diáspora, pero seguro que sí en Yavne lo más especial y admirable en esta gran comunidad es la manera que reciben a una variedad muy amplia de judíos, dan lugar a las diferencias pero todos son recibidos con una gran sonrisa.
Otra cosa que tiene el Yavne, es que inreíblemente después de solamente tres semanas, puedo decir que se nota que todos acá se sientan parte de una gran familia.
P: ¿Crees que podés apreciar cosas de tu propia vivencia judía al estar ahora en una comunidad judía fuera de Israel?
R: Mi propia vivencia judía simpre fue sabiendo la importancia de la unión de todos los judíos y responsabilidad mutua con el prójimo.
Aparte de eso los sabios ya nos dijeron. "La ganancia del que da es más grande que la del que recibe" . Estoy seguro que mi familia y yo, en nuestra shlijut en la comunidad, nos elevaremos más espiritualmente.

Recuerdos
P: ¿Qué lugar ocupaba Uruguay en la casa de tus padres en Israel? O sea…¿siguió estando presente en vuestra nueva vida?
R: La verdad que la casa de mis padre siempre fue como la casa de "Avraham avinu", siempre con muchos invitados, varios de ellos, uruguayos que están en Israel. Como uno de ellos me dijo "la casa de tus padres es el mejor lugar con la mejor comida para pasar Shabat en Israel". La verdad que a mis padres siempre los admiré y tengo mucho para aprender de ellos.Así que sí, los uruguayos siempre fueron parte de nosotros.
P: ¿Algo más que desees agregar?
R: Muchas gracias, fue un gusto.
P: La verdad que para mi también.
R: Aprovecho a invitar a todos a venir al Yavne en estas fiestas, que son una gran oportunidad para empezar a ser parte se esta gran comunidad que es una verdadera familia. ¡Los esperamos! Muchas gracias.