El mundo no cambio, los judíos si

Desde el 7/10, gran parte del mundo, sobre todo el Occidental, tuvo la gran oportunidad de demostrar que  todos estos años de solidaridades dialécticas y apoyos mediáticos podían ser traducidos a una acción concreta y practica, apoyo sin reservas y sin peros a Israel.

Ahondar  en lo que pasó, hoy a casi un mes de los acontecimientos, ya no tiene sentido. El que quiso entender lo que paso, lo entendió. El que no quiso, nunca va a entender.

¿Por qué esto?  El tiempo del razonamiento está claramente agotado. No parecía una cuestión tan difícil de entender. Un país agredido por una entidad terrorista… a un nivel tan grande, solo ameritaba que la respuesta fuera la eliminación de Hamas.

En la historia reciente de la Humanidad, digamos desde el fin de la 2ª guerra mundial hasta ahora, han existido y existen innumerables conflictos bélicos. Los mismos ocurren en diversas partes del mundo, algunos más cercanos, otros más lejanos. Algunos nos atañen más de cerca, otros no.

En general, la gente no opina de la mayoría de ellos, es más, ni siquiera conocen su existencia.

Sin embargo hay uno, del que todos opinan, en la enorme mayoría de los casos, sin mayor conocimiento del mismo y en el peor de los casos, tan solo buscan fuentes de (des)información que permitan confirmar su prejuicio ,mas conocido como el sesgo de confirmación.

Quienes han sido antisemitas toda su vida, en nada cambiarán su forma de ver el mundo, luego del 7/10. Es más, les servirá para reafirmar su forma de ver las cosas. Inventaran causas, excusas, justificaciones no solo para señalar que las atrocidades de Hamas tienen “razones” sino que hasta son “legales”. Si, hasta eso.

Occidente, hija de la cultura y valores judeo cristianos hubiera debido entender, que justamente eso es lo que estaba en juego en este conflicto, hoy armado, pero que siempre fue de base religiosa, nunca territorial.

Hamas no tiene ni tuvo aspiraciones territoriales, su carta fundacional lo dice y ellos lo repiten hasta el cansancio que su único objetivo es destruir al Estado Judío.

Ok, eso ya lo sabíamos. Ahora… sabíamos que una buena parte de Occidente iba a ponerse del lado de Hamas? En lo personal, siempre supe que una parte sí, pero la parte es más grande de lo que uno piensa.

¿De dónde viene el odio?

De varias fuentes. De los pueblos que han sido educados en el odio a Israel, sin duda. Pero esos pueblos, no son Occidente. Y nunca ocultaron ni disfrazaron su posición.  Son sinceros, y no hay razón para no creerles. La prueba de ello es que en sus territorios no vive ningún judío (o si los hay son ínfimos en número). Israel es una herida molesta en medio de su mundo. Así piensan.

Hay otro gran grupo, que son los inmigrantes de esos mismos países, que viven en países occidentales, básicamente Europa. Ese grupo, que en buena parte  no se integra al mundo occidental y  no desea hacerlo,  vive al margen (en sentido geográfico, económico  y cultural) va lentamente erosionando el apoyo a los valores que Israel encarna. Prueba de ello es su participación en las marchas anti Israel, pro Hamas y en sus opciones políticas siempre alejadas de grupos mas afines a principios básicos del Estado de Derecho. Tampoco ocultan sus ideas.

Los más radicales señalan que no se trata de ser parte de Occidente, sino que Occidente sea parte del mundo musulmán, como lo fue hace siglos atrás. Es parte de la cosmovisión islámica, el regreso al AlAndalus.

Pero hay un grupo más, y es el de los grupos de izquierda que no condenan las acciones de Hamas, y en muchos casos las apoyan. Algunos disfrazando su ideario, como apoyo a la causa palestina y otros directamente justificando y militando las acciones terroristas.

Las manifestaciones, algunas de ellas multitudinarias, como en Paris y Londres, son prueba de la unión de todos estos grupos.

No se nos escapan los pronunciamientos de diversos países, entre ellos Chile, Colombia o Venezuela que comparten la idea que Israel siempre es culpable.

Lo ocurrido en algunos campus universitarios  de USA, es otra prueba concreta de la actuación de estos grupos.

Es cierto también, que estos mismos militantes de izquierda responden a las ideas llamadas progresistas o Woke, que concentran todas las causas en una sola causa (idea básica de la llamada “interseccionalidad”) y que propugnan la división del mundo entre opresores y oprimidos.

En su forma de ver el mundo, los palestinos son las víctimas. La narrativa o relato que han generado, les impide pensar de otra forma, aunque la realidad de los hechos, así lo demuestre.

Lo absurdo del caso, es que la gran mayoría de esos militantes, todos ellos reunidos bajo la forma de defensa de los “colectivos”, serian objeto de muerte inmediata si difundieran sus ideas en Gaza.

El comunismo es enemigo del Islam, por ateo.

El feminismo, también, porque la mujer en el Islam está subordinada al hombre.

En el Islam, no hay principio de igualdad como se lo conoce en Occidente, los cristianos o judíos son inferiores por mandato de la Sharia.

A todo ello, se suman las ideas anti norteamericanas de los mismos, entendiendo a Israel como un peón de USA.

Ninguna de estas ideas nacieron  ayer, llevan décadas de penetración en las elites universitarias de las más prestigiosas universidades  de USA básicamente.

Todo era cuestión de encontrar un punto de encuentro con los movimientos mal llamados pro palestinos y la unión  se produce simbióticamente.

¿Porque digo mal llamados?

Si alguien defiende una causa, cualquiera que ella sea, debe hacerlo, sin importar quien está del otro lado de esa causa.

Si para algunos, la causa palestina se explica porque Israel esta del otro lado, entonces no son pro palestinos, sino tan solo pro Israel.

En la Historia, los palestinos, cualquiera sea la definición técnica que se tenga de su origen, han sido expulsados, masacrados y desplazados por: Egipto, Jordania, Líbano y Kuwait, siendo estos los casos más conocidos. Siria, en su guerra civil, asesino y desplazo miles de palestinos. Nunca hubo mayores reclamos de Occidente por ello, ni manifestaciones, ni intentos de linchamiento a nadie.

Las razones de esas tragedias son variadas, pero la conducta de la dirigencia palestina, es causa más que importante en dichos acontecimientos.

A lo largo de la Historia, la dirigencia palestina ha sido protagonista de diversos hechos que han llevado a su expulsión y combate. Ejemplos: el llamado “setiembre negro” en Jordania, el apoyo a Saddam Hussein en Kuwait, el vinculo con los Hermanos Musulmanes en Egipto.

Pues bien, el mundo no ha cambiado mayormente en relación a los judíos. Confieso que muchos nos sentimos como en 1938.El marcado de casas en Paris y Berlín, sin duda refresco situaciones que pensábamos solo estaban confinadas a la Shoah.  Es más, aprendimos por la vía del caso real,  como pudo llegar el nazismo al poder, sin nadie que lo frenara. Entendimos el valor o el quitarle el valor al  bien, del silencio de las mayorías.

Entonces, volviendo a la búsqueda de la identidad de los grupos de izquierda progresista o más bien islamoprogresistas.

¿Cómo identificarlos? Este grupo sí  tiene un discurso que oculta su antisemitismo. Son conscientes que su predica no puede ser tan lineal y tan poco “políticamente correcta”. 

Como lo hacen entonces? Se disfrazan de antisionistas. Ese es su método. O lo disfrazan como críticas a las políticas del gobierno de turno del Estado Judío.

Pero si bien las críticas a las políticas de cualquier país son legitimas dentro de la libertad de expresión del pensamiento, ellas dejan de serlo cuando esos mismos argumentos se usan para negar el derecho a la existencia de ese Estado al que critican. No critican lo que hace o deja de hacerIsrael, critican su existencia o sugieren ideas que llevan a su desaparición. 

Ni siquiera se animan a decir lo que en el fondo desean (al igual que el resto de los otros grupos antes mencionados) que es ni más ni menos que  la desaparición de Israel. Ej. El “fromtheriver to the sea…” que creen uds que significa?

O pedidos de “ceasefire” o diálogos con contrapartes que un dia si y otro también cometen atentados terroristas contra israelíes (judíos y no judíos).

¿Qué  pasó del otro lado?

Antes de 1948, no existía el Estado de Israel. Muchos han conjeturado que hubiera pasado si, Israel hubiera existido antes de la 2ª Guerra Mundial. Se hubiera evitado el Holocausto? ¿Hubieran podido escapar los judíos europeos ¿  Difícil saberlo.

Lo que sí sabemos es que Israel  desde su declaratoria de independencia ha jurado que lo ocurrido en el Holocausto no volvería a ocurrir. Y no ha ocurrido.

Lo ocurrido el 7/10 es sin embargo el evento singular de matanza de israelíes (la mayoría judíos) más grave desde esa fecha.

¿Cómo se espera que reaccione entonces el Estado de Israel?

Más allá de los pedidos irreales de algunas potencias occidentales, la opción era y es eliminar a quien cometió dichas atrocidades. Claro, es fácil saberlo hoy con el diario del lunes. Sin embargo, quienes más sabían cuál sería la respuesta israelí eran y son sus enemigos inmediatos, Hamas, Hezbollah y el titiritero de ambos, Iran.

Esta vez, Israel, sin dudas y sin vacilaciones (pero no sin presiones en contrario), decidió liquidar al enemigo, con el agregado no menor y diría que mayor,  por ser un imperativo moral y hasta religioso, el rescate de los secuestrados.

Por supuesto que quedará para una etapa posterior, saber cómo pudieron fallar las defensas el día 7/10. También quedara por saber si la política hacia Hamas de disuasión sin choque directo frente a Hamas de las últimas décadas fue  la correcta o no. 

En ese sentido, ya se avizoran  cambios en el futuro relacionamiento (o no relacionamiento) entre la Franja de Gaza e Israel. (Fin de todo tipo de cooperación, fin de los trabajos en Israel para habitantes de Gaza, etc.)

A la fecha, esta en plena actividad la operación del Ejército de Israel en Gaza y no está cerca de concluir la misma.

 ¿Cuál será el futuro de Gaza ? Aun no se sabe, pero el tema está en discusión en varios ámbitos (USA, Israel, Egipto, Jordania, la Autoridad Palestina, la propia ONU).

Lo que si queda claro, es que luego del golpe que conmovió la imagen de Israel como potencia regional, la misma debe ser recompuesta y reafirmada. No debe quedar la menor duda para cualquiera de los enemigos de Israel que lo ocurrido, no volverá a ocurrir. Que Israel aprenderá de sus errores y que deberán hacerse ajustes.

Todo ello, sin perjuicio de los cambios políticos que con seguridad vendrán.

El discurso de Hassan Nasrallah y la no apertura del frente Norte por parte de Hezbollah (sea por lo acontecido en Gaza, sea por la presencia de flota norteamericana en modo disuasorio) llevan a pensar que Israel saldrá airoso de esta situación.

Es de esperar que en un futuro más o menos próximo se retomen las conversaciones con Arabia Saudita para continuar el proceso de paz por la vía de los Acuerdos de Abraham. 

No pasa inadvertido que Arabia Saudita permitió el uso de su espacio aéreo a Israel y que intercepto cohetes lanzados por huties desde Yemen hacia Israel, más allá de declaraciones altisonantes en sentido inverso al camino de paz.

Este es el Israel de 2023, por un lado golpeando al enemigo y por otro continuando los esfuerzos por buscar la paz con quien ofrece paz y aislando a quienes quieren la destrucción de Israel.