El “gesto” fue pedido por Rusia, a raíz de la recuperación del cuerpo del soldado Zejaria Baumel
Este domingo a media mañana Israel entregó a representantes de la Cruz Roja Internacional en el pasaje fronterizo Quneitra en los Altos del Golan, a Ahmad Khamis y Zidan Tawil, dos sirios que estaban presos en el país. Uno de ellos, por razones de seguridad. El otro, como traficante de drogas.
Su liberación-aunque uno de ellos de todos modos estaba por ser excarcelado- fue pedida por Rusia a Israel después de la recuperación del cuerpo del soldado Zejaria Baumel (Z”L), devuelto a Israel 37 años después de su desaparición en la batalla de Sultan Yaaqub en el Valle del Líbano, contra tropas sirias.
Baumel estaba sepultado en el cementerio del campamento de refugiados palestino Al Yarmuk cerca de Damasco. Se estima que allí están también los otros dos desaparecidos israelíes de aquella batalla, Yehuda Katz y Tzvi Feldman.
Rusia, que tiene presencia militar directa en Siria y gran margen de maniobra en su territorio, fue la que sacó varios cuerpos del lugar y los hizo llegar a Israel. En pruebas de ADN Israel identificó a Baumel y los otros cuerpos fueron devueltos a Siria.
Pero el régimen de Damasco puso el grito en el cielo al publicarse los detalles y se estima que fue por eso que Moscú pidió-¿exigió?- algún gesto de parte de Israel.
El gabinete de seguridad israelí no estaba al tanto del tema y los únicos que sabían era el Primer Ministro Netanyahu , la Ministra de Justicia (saliente) Ayelet Shaked y el Presidente del Estado Reuven Rivlin.