El Hospital Hadassa de Jerusalem acaba de informar la buena nueva.
Se trata del soldado Navé Rotem que resultó herido gravemente el viernes 14 de diciembre en un ataque. Hadassa informó que ha sido dado de alta en buen estado y salió a su casa “caminando sobre sus dos piernas”.Navé fue acuchillado por un terrorista que se infiltró al puesto en el que montaba guardia cerca de Bet-El y sufrió serias heridas.
Durante toda la semana recibió tratamientos especializados de neurocirugía, pero también de otorrinos, plásticos y cirujanos maxilofaciales. “Nave regresó a su casa fuerte y sonriente”, dijo el Dr. Ido Paldor del departamento de Neurocirugía en Hadassa Ein Karem, agregando que volverá al hospital a una serie de tratamientos y seguimiento por parte de expertos en distintas disciplinas.
Dr. Ido Paldor, neurocirujano en el hospital Hadassa Ein Karem de Jerusalem
Los padres del soldado, Osnat y Moti Rotem, agradecieron al hospital Hadassa por la dedicación y los cuidados brindados, celebrando tener a su hijo consigo de vuelta en casa. “Navé se ha ido recuperando y seguirá haciéndolo”, dijo la madre.
Pero no todas son buenas noticias.
Otro soldado que resultó herido en el segundo atentado en la zona de Guivat Asaf, aún se halla en muy grave estado, con respiración artificial y en coma. Asimismo, continúa hospitalizado –aunque ahora ya definido como herido leve-un civil de 22 años que resultó herido el 9 de diciembre cuando terroristas dispararon hacia una parada de ómnibus cerca de Ofra.Ese fue el ataque en el que hubo una decena de heridos, entre ellos Shira y Amihai Ish-Ran, la joven pareja que perdió pocos días después al bebé que hicieron nacer en cesárea de urgencia debido a las heridas de la mamá.