Los imaginamos planeando dónde atacan esta vez, cuál será el escenario de turno para manifestar su odio antisemita a través de pintadas inaceptables. A mi modo de ver, son terroristas también si no apretaron el gatillo…por ahora. Son todos aquellos que en muchas oportunidades salieron a las calles a manifestar con banderas palestinas, presentándose como defensores de los derechos humanos, aunque nunca les importó el sufrimiento palestino a manos de los terroristas de Hamas. Son los que salieron a gritar consignas como “Palestina libre desde el río hasta el mar”, lo que equivale a llamar a la desaparición de Israel. Los que nunca condenaron la masacre del 7 de octubre.
Lo que más muestra que son antisemitas con agenda de odio y no quienes expresan legítima discrepancia con Israel, es que esta nueva ola de frases difamatorias de Israel la pintaron ensuciando las paredes exteriores de una institución central de la comunidad judía uruguaya, la Nueva Congregación Israelita (NCI), donde también funciona la sede de B´nai B´rith, una institución judía uruguaya abocada desde siempre a aportar a la sociedad.
Esto es terrorismo de odio. Antisemitas enchastran las paredes de una institución comunitaria uruguaya , la NCI. No, no es legítima discrepancia con Israel. Es odio que demoniza. Y estamparlo en las paredes de la comunidad judía, es una afrenta a los uruguayos judíos todos, que… pic.twitter.com/Khs63fkpkR
— Jana Beris (@JanaBeris1) May 15, 2025
De allí salió el gran programa Salir Adelante que brinda apoyo a jóvenes en secundaria que tienen buen potencial en sus estudios pero precisan un empuje para poder lidiar con todos los desafíos que les supone su entorno personal. De allí se anunció esta semana una actividad con mujeres que tienen interesantes experiencias que compartir, aclarándose que el pago de entrada estará destinado enteramente a escuelas públicas.Y tanto más…
Las pintadas de “Israel genocida”, además de ser ignorantes y faltar a la verdad, hechas en las paredes de la NCI, son una afrenta a toda la colectividad judía uruguaya, parte integral de la ciudadanía, uruguayos que aportan al país mucho más que los que salen de noche con la pintura y lo único que saben hacer es difundir odio.
Son una combinación de antisemitas uruguayos y de incitación desde afuera, de ignorantes a los que les lavan el cerebro y aceptan con gusto lo que dicen los terroristas, y no descartamos que reciban financiación de elementos poderosos que se oponen a Israel. ¿Pruebas? No, no tengo pruebas. Sólo estoy especulando. Es que sería demasiada casualidad pensar que todo es espontáneo, las manifestaciones en las universidades norteamericanas, en las calles de diversos países europeos, y hasta las pintadas de odio en Uruguay.
Me resulta hasta simbólico que mientras estos terroristas con pinturas enchastraban las paredes de una institución comunitaria uruguaya, en Israel se confirmaba la muerte de Tzeela Gez, una joven madre de tres hijos que fue asesinada a balazos por terroristas palestinos cuando estaba en camino con su esposo a la sala de partos en el hospital, para dar a luz a su cuarto bebé. De fondo, es la misma línea, hay un hilo conductor. Unos y otros no reconocen el derecho de los judíos a vivir en paz y seguridad.
“No nos derrotarán”, dijo Hananel, el esposo de Tzeela, que iba conduciendo y que resultó levemente herido. “Estoy quebrado, pero seguiremos adelante”. También la comunidad judía uruguaya seguirá realizando actividades en sus múltiples instituciones, preservando tradiciones y aportando a la sociedad uruguaya toda de la que es parte.
Los terroristas no lograrán su objetivo.Ni acá ni allá.
Mis amigos israelíes me preguntaron muchas veces si hay antisemitismo en Uruguay. Siempre respondí que hay antisemitas, como lamentablemente en todo el mundo-inclusive donde no hay judíos- pero que Uruguay no es un país antisemita. Sigo pensándolo. Pero las cosas están empeorando.
La Justicia debe intervenir de inmediato. Esto no es solamente una cuestión de los judíos. Es un veneno para Uruguay.