Entrevistas

Juan Giansanti y su novela El pianista desnudo

Juan Giasanti es  profesor de literatura. A finales del 2019 publicó su primera novela “El pianista desnudo”.

En tu casa de niño, los libros eran un elemento presente ¿quién leía?

Para empezar te diré que nací en una familia de clase media.Soy el mayor de tres hermanos. Mi padre aún es propietario de una tienda de calzados. Es un negocio que fue pasando de generación en generación, y es una de las primeras zapaterías que tuvo Montevideo. Mi madreera maestra y aún hoy se dedica a la pedagogía. En mi casa siempre hubo libros académicos, de educación. También había libros de ficción y enciclopedias.

¿Cuándo fue la primera vez que pensaste que ibas a ser escritor?  

Tenía alrededor de diez años, sentía placer cuando abría un libro. Los libros siempre me parecieron objetos mágicos.De niño quise conformar una biblioteca y armé estantes en mi cuarto. Con el tiempo, las paredes se fueron llenando de libros.

¿Cómo fue el proceso? 

La persona que más influyó fue mi abuela, no hubieraintentado escribir si ella no me hubiera relatado tantas cosas. Su voz me apasionaba, podía escucharla durante horas. Era un ser que me hipnotizaba. Ella había recorrido países muy lejanos y le gustaba describir cómo eran las ciudades de Europa oriental. Checoslovaquia, Hungría, Rumania: gracias a ella siempre sentífascinación por esos países. Al terminar la escuela escribía versos y narraciones breves. La identidad parte de una construcción verbal, muchas veces nos acomodamos a la idea que los demás perciben de nosotros. Tal es así que luego de leer ante mis padres aquellos primeros textosse me consideró, automáticamente, el escritor de la familia. No hice otra cosa desde entonces que dedicarme a las letras. Lo mío no podía ir por otro lado. Si renunciaba, iba contra el destino que ellos me habían asignado. Los aplausos, muchas veces, te imponen un camino. Recuerdo que mi madre me empezó a regalar libros. En definitiva, yo terminé escribiendo porque me dijeron que era escritor. “Desde el jardín” de Jerzy Konsinski fue uno de los primeros libros que me obsequió mi madre.

¿Qué ocurrió después?

Luego, a los quince años, asistí a un de taller.Los profesores eran Esteban Otero e Isabel Sánchez, una pareja de profesores de literatura que se habían jubilado. No tenían hijos, así que disfrutaban de mis visitas. Yo era el único alumno. Durante cuatro años, cada miércoles,caminaba las cinco cuadras que me separaban de aquella casa enigmática. Cada vez que traspasaba esa puerta me transportaba en el tiempo y en el espacio.Entre dos gatos y una biblioteca de miles de ejemplares, conocí la obra de escritores que luego marcaron mi vida. Leíamos cuentos de Hemingway, Kafka, Borges, Donoso. También estudiábamos a los maestros rusos: Nikolái Góogol, León Tolstoi, Dostoyevski. Yo en ese entonces era un adolescente tímido. Cuando llegaba a mi casa, escribía, pero siguiendo el estilo del escritor que estábamosestudiando en el taller. Intentaba copiar el estilo de esos escritores, imitarlos.

Antes de ser escritor, se es por naturaleza lector. ¿Cuáles son esos libros que te marcaron en la vida?

Muchos fueron los libros que me hicieron amar la literatura. Te nombro tres libros europeos de distintas épocas y tres libros sudamericanos de autores que fueron contemporáneos. “El Quijote” de Cervantes. “El castillo” de Franz Kafka. “Escoria” de Irvine Welsh. De nuestro continente, “Los Adioses” de Onetti, “Cien años de soledad” de García Márquez y “Ficciones” de Borges.

¿Cuáles son los autores en los que vos encontraste tu voz? 

Los escritores que me enseñaron a narrar fueron los norteamericanos, todos esos que continuaron con la escuela de la “teoría del iceberg” de Ernest Hemingway. Los autores que me mostraron el camino fueronHenry Miller, Bukowski, Burroughs, Jack Kerouac. Descubrí que esa literatura urbana, de posguerra, rebelde, de problemas cotidianos, se parecía a lo que yo quería escribir. Raymond Carver fue también mi maestro. Hoy en día leo a Richard Ford y a Tobías Wolff. Actualmente estoy leyendo a Grace Paley.

Cuando escribiste "El pianista desnudo", ¿cómo hiciste para poder ir más allá  del prejuicio de que te estuvieron mirando y viendo a vos, Juan, en cada escena del libro? 

Te diré que muchas veces me han preguntado si esa historia es un invento o es una especie de autobiografía. Lo cierto, es que las novelas siempre terminan construyendo una realidad nueva.Algunos capítulos del libro nacieron gracias a algo que me sucedió, pero ese acontecimiento real es solo una semilla. Las experiencias vividas juegan un rol significante a la hora de escribir, pero luego los protagonistas cobran vida y el escritor empieza a esculpir a pedido de su protagonista, desde la necesidad del héroe. Hemingway decía que uno debe escribir sobre lo que conoce. 

El libro tiene claramente tres partes. En la parte de los viajes, siento que fuiste a esos lugares.

Me fui de viaje. El viaje más loco de mi vida. Soy una persona que recorre mucho. Pero esavez fue distinto, porque decidí hacerlo en función del libro. No recomiendo a nadie viajar de esa forma. Estaba todo el tiempo con una libreta en la mano. Fue espectacular y extraño. Conocí lugares increíbles. En los trenes escribía.

¿Cómo haces para incorporar los olores al relato? Hay una escena de un hostal en Madrid donde los olores son protagonistas. 

Recuerdo que cuando terminé esa escena se la di a mi hermano y le pedí que la leyera en voz alta. Observando su cara, descubrí que funcionaba. Es una escena que tuve que pulir una y otra vez, porque no lograba dar con lo que quería contar. La primera versión la escribí en Madrid, en un hostal semejante.

Relatas las escenas de sexo de una manera cruda y descarnada, sin caer en la grosería. ¿Cómo se logra? 

Quería escribir un libro en donde se contara todo eso que la mayoría de los escritores suelen esquivar. Algunos lectores se sintieron muy a gusto. Es una literatura muy realista.Para que todo parezca real estuve años trabajando sobre el lenguaje. Otros lectores, sin embargo, me confesaron que les resultó fuerte. El artista no debe intentar colmar las expectativas de todos; eso es imposible. Yo intenté colmar mis expectativas. ¿Cómo se logra? Todo se consigue con esfuerzo, sin dormir, tachando, en la soledad.  

¿Tienes una rutina a la hora de escribir?

En lo personal, puedo estar dos o tres meses sin escribir, pero llega un día que se me hace imprescindible sentarme y no detenerme. Es una fuerza mayorque me domina. En esos momentos estoy muy susceptible a los ruidos, no quiero distraerme. Solo en la calma absoluta se puede estar tallando una frase. Yo te diría que el porcentaje de tiempo de creación en comparación con el que utilizo para corregir se distribuye de la siguiente manera: un 5 % escribo, un 95 % corrijo. Así se distribuye el tiempo que le dedico a la literatura. Escribo y corrijo en la noche. La noche me garantiza la paz que necesito.

¿Qué proyectos tienes en la mente respecto a la escritura?

Buena pregunta. Ahora estoy escribiendo la continuación de “El pianista desnudo”. El libro ya tiene nombre pero es un secreto. Prometí no decírselo a nadie.

¿Vos lees papel o digital? 

Las novelas las leo en papel. Me gusta sentir las hojas, olerlas. Los diarios los leo en soporte digital.

El protagonista de tu novela se llama Javi, ¿podrías definirlo?

Javi, el protagonista de la novela, es un ser incompleto. Necesita sentir amor, necesita tocar un cuerpo para no sufrir de soledad. A su vez, es un solitario. Javi es un ser que vive en la constante búsqueda. Las mujeres son su motor. Sin mujeres no hay Javi, no hay obra, no hay nada. Él se aleja de Carla porque ambiciona ser realmente amado y volver a sentir, conocer el cuerpo de otras chicas, otras geografías…Carla ya era una tierra conocida y este tipo es un aventurero; y los aventureros, al llegar a una playa, descansan para continuar su ruta. Lo que define al aventurero es el movimiento,  el seguir descubriendo, un afán de llegar a los confines del mundo, como le sucedió a Alejandro Magno. El hombre quieto produce tristeza, porque el hombre es movimiento. Somos bípedos y si hay algo que nos mantuvo siempre motivados fue el preguntarnos qué había más allá de las montañas. El viaje lo es todo para Javi, se descubre, vive momentos únicos, lucha con su propia novela llamada “El fugitivo”.

¿Qué te motivó a escribir “El pianista desnudo”? 

Solo construí un personaje y seguí sus pasos. El protagonista me dominó de tal modo que fui su esclavo, su redactor, su secretario. Yo existí en esos años para que él pudiera ser. Mi mano fue rehén de su apatía, de su discordia y su amor por el mundo. El personaje me encerró en una jaula y sólo me dejó escapar una vez que terminé de redactar su historia. A él le debo mi viaje por Europa. Quise conocer las calles por las que Javi se iba a mover. La novela terminó y ahora él está en un libro que ya no es mío. No es mi libro. Es la historia de quien quiera leerla.

 

 

Janet Rudman
(13 Junio 2020 , 13:47)

Ultimas Noticias Ver más

Esta página fue generada en 0.0508041 segundos (5654)
2024-04-23T09:48:02-03:00