“El miedo nos está matando más que el Coronavirus”, advierte el Químico Farmacéutico Bernardo Borkenztain
En estos tiempos de locura, en los que el mundo lidia con el Coronavirus pero también con muchas mentiras que circulan por las redes, es clave saber cómo proceder, qué es realmente lo que hay que hacer. Pero no sólo para protegernos en forma práctica del virus (quedarse en casa, no andar dando vueltas, lavarse la manos y mantener distancia, entre otras cosas) sino porque al no poder discernir entre las verdades y los inventos que nos llegan, nos arriesgamos a sumirnos en una ansiedad que se podría evitar.
Esto no significa que hay que minimizar la importancia de los riesgos, pero sí que hay que abordarlos en forma racional y con la mayor tranquilidad posible.
Para hablar de esto, y más, nos dirigimos al Químico Farmacéutico uruguayo Bernardo Borkenztain. Es egresado precisamente de la Facultad de Química de la UdelaR. Fue docente universitario. Es experto en Gestión de la Calidad y del Riesgo egresado de UNIT, el Instituto Uruguayo de Normas Técnicas, la principal agencia uruguaya en temas de gestión de la calidad y normalización, junto con el LATU. Es estudiante de Filosofía desde el 2001. Y como actividad periodística es crítico de teatro y columnista de Montevideo.com desde el 2007, además de columnista de radio desde el 2001 y fijo desde el 2017.
En su trayectoria y preparación profesional, combina áreas que son muy distintas entre sí y al mismo tiempo muy relevantes a la situación que estamos viviendo. Este es un resumen de nuestra conversación.
Reproducimos por separado un artículo suyo en Montevideo Portal, con explicaciones muy concretas y útiles relacionadas a la epidemia actual.
P: Además de las aclaraciones científicas imperiosas en la situación actual respecto a qué hace o no hace el virus y cómo se lo combate, sobre lo que ya has escrito, me pregunto si tenés un mensaje general sobre la actitud que a tu criterio hay que tener, quizás algo que no haya sido abordado lo suficiente hasta ahora.
R: Hay un punto que no diría que no ha sido mencionado, pero que quizás no se destacó lo suficiente. Hay que cortar con la propagación del miedo, que nos está matando más que el Coronavirus. Es el miedo el que hace caer las bolss, el que hace que sea insoportable quedarse en casa. Nada justifica la tonelada de barbaridades que circulan.
P: Aquí se juntan dos de tus especialidades, química y filosofía ¿verdad?
R: Así es. Yo me he dedicado mucho a filosofía de la ciencia y tengo muchos años de trabajo en divulgación científica, que significa leer trabajos científicos y traducirlos al idioma “común”…
P: O sea que los pueda entender un lector promedio que no es científico.
R: Exacto. Y esto me da la ventaja de filtrar rápidamente información relevante en estos temas. Cuando estudié Química en Uruguay, también incluía muy buenos estudios de Biología y otras materias, que me prepararon para leer ese material.
P: Y teniendo de fondo esos conocimientos y el sentido común ¿tenés algún consejo concreto sobre cómo saber qué es cierto y qué es mentira de todo lo que nos llega estos días a nuestros celulares?
R: Es muy simple. Si llega por whatsapp y no está firmado, es un invento. Hay mucha porquería que llega por internet. “Al primo de una amiga, que yo conozco, le pasó esto….”. Y nosotros pensamos que el primo o la amiga son del que nos lo mandó, pero no, él ni sabe de dónde le llegó, pero lo sigue mandando…y no aclara para que su mensaje no pierda impacto.
También está eso de “prestigiosos científicos de la universidad tal afirman…”, pero si no hay una hoja membretada de la Organización Mundial de la Salud, de la Clínica Mayo, del Ministerio de Salud Pública, no podemos creerlo. Si viene con esa formalidad, vale la pena. Si no, es una pérdida de tiempo. Lo mismo con los audios.
P: Cuando uno no puede confirmar la veracidad de la identidad que se presenta en el audio.
R: Claro. Si viene en un video youtube institucional, o del Ministerio mismo, es serio. Si no, es un problema. Acá hay que desconfiar, porque las probabilidades de autenticidad están en contra.
P: De todos los mensajes que circularon estos días ¿recordás ejemplos concretos de cosas que decís “valen la pena”?
R: Todas las publicaciones de la Organización Mundial de la Salud y del MSP. Estos días hubo una muy buena de la Cátedra de Farmacología de la UdelaR. Todo eso está firmado, está respaldado institucionalmente.
P: Se habla mucho de las muestras que se toma a la población, de los exámenes de Corona. Expliquemos por favor la importancia de este punto.
R: Se habla mucho, en efecto, de las muestras que se toman, los exámenes en esos kits para ver si uno tiene o no Corona. Lo que pasó en Europa al principio, más que nada en Italia, fue que se tomaba muestras a la gente sintomática, no a la sana. Y el problema es que si no se toman esas muestras al azar, el resultado que aparece es una distorsión, que probablemente aumente los datos negativos.
P: ¿Cómo lo está manejando eso Uruguay?
R: Uruguay está tomando muestras no a gente que ya está enferma sino que estuvo en contacto con enfermos. Y si bien no es ideal-recordemos que no tenemos suficientes kits-es más exactos que ir sólo a los que ya tienen síntomas.
P: Expliquemos cómo funciona esto.
R: La estadística es una ciencia muy exacta y menos caprichosa que lo que se piensa. Lo básico es que la muestra sea representativa de la población. Si no lográs eso, los datos son cuestionables siempre. Para lograrlo, hay que tomar una cantidad suficiente de muestras-hablando de este caso, pero lo mismo sería para una encuesta de opinión, entrevistar a suficiente gente-y hacerlo al azar, para evitar lo que se llama un sesgo del muestreo. O sea para evitar que la sicología del encuestador influya en el resultado que se publique. Y si se toma muestras de una población que no es representativa de la mayoría, no podés generalizar el resultado.
P: Y cuantas más muestras se tomen, mejor. Es lógico.
R: Claro. Es lo que está haciendo Corea del Sur, cantidades enormes de exámenes. Cuanto más hacen, más probabilidades hay de que los resultados sean representativos. Pero recordemos que esto no depende solamente de los muestreos. También hay otro elemento muy importante, preguntar a los infectados dónde han estado, así se ubica a los posibles contagiados. Es la cadena de trazabilidad, muy importante.
P: ¿Qué impresión tenés de las medidas que está tomando Uruguay?
R: De momento no hay suficientes datos, pero parece que las medidas son muy acertadas. Lo central es retirar a la gente de la calle.Es que es como el dominó. Si no ponés fichas una al lado de la otra, las fichas no van a caer. Así de simple.
P: Y en esto-digo algo que todos oímos hace semanas, en todo el mundo, y que es lo central-, no depende del gobierno. Depende de cada ciudadano. Claro que el gobierno tiene que hacer lo suyo, como el cierre de fronteras, pero muchísimo depende de cada uno.
R: Eso es indudable. En esta situación debemos subrayar la responsabilidad personal, individual. No podemos decir que el Estado va a resolver todo. No. Todos y cada uno debemos resolver nuestra parte.
P: Muchas gracias.
R: A ti.