Te cuento que nosotros como sociedad israelí ya estamos acostumbrados a estas situaciones, y viviendo en el centro del país, y siguiendo los protocolos y orientaciones del Israel Home Front Command nos sentimos seguros y tranquilos.
No así quienes viven en el sur, quienes sufren en todo sentido y en forma constante, teniendo muertos, heridos, situaciones de verdadero pánico con 15 segundos para llegar a los refugios y destrozos materiales, afectando totalmente sus vidas y rutinas.
Esta vez la escalada fue rápida ya que nos atacaron en Jerusalém, así como a Tel Aviv y alrededores en las primeras horas, pero con un condimento más que fueron las manifestaciones agresivas de ciudadanos árabes israelíes y que hace temer a una escalada de confrontación social dentro de Israel.
Esta situación complica la convivencia armónica y pacífica que tenemos entre todos los ciudadanos, generando un clima peligroso en un país donde muchos de sus ciudadanos están armados y siendo en estos momentos una de las mayores preocupaciones de la policía y del Gobierno.
A mi parecer esto no es algo espontáneo, entiendo que obedece a un cúmulo de factores como el final de Ramadán, el día de Jerusalem, la incertidumbre política interna, suspensión de las elecciones en la Autoridad Palestina por parte de su liderazgo y presiones externas que hicieron propicio el momento para que el grupo Terrorista Hamas y la Jihad Islámica aprovechen la ocasión y nos ataquen tratando de causarnos daño, posicionándose como la entidad dominante entre los palestinos.
De todas formas la sociedad israelí siempre se une ante las dificultades y confía en el Gobierno, ejército y fuerzas de seguridad, entendiendo que van a evaluar y hacer lo que mejor entiendan para garantizar la existencia de Israel y la seguridad de sus ciudadanos.
Particularmente nosotros estamos bien y nuestros amigos también.
AM ISRAEL JAI!!!